“Ahora tenemos muchos la palabra sostenibilidad en boca, pero yo invitaría a todo político que hable de ella, a que me justifique la sostenibilidad de este colapso legislativo”

OPINIÓN. La arquitectura del turista. Por Luis Callejón
Arquitecto


18/10/23. Opinión. El arquitecto y experto en turismo Luis Callejón escribe en su colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com un artículo sobre la sostenibilidad: “El ser humano intenta evitar los cambios, y más si los saca de su zona de confort, pero ha llegado IA para sacarnos los colores y mostrarnos la tela de araña que hemos realizado. Por ello creo que antes o después pondremos a...

...jugar a IA y el cambio será abismal, con la posibilidad de convertir la insostenibilidad en sostenibilidad”.

La sostenibilidad insostenible

El comienzo de mi formación como arquitecto, se desarrolló en un entorno donde los proyectos se componían de una memoria y unos planos (como hoy en día), pero la cantidad de justificaciones de Leyes y normas, hacen que pasemos de unos 100 folios en mis comienzos a más de 600 folios para proyectos de las mismas características hoy en día, lo que no ha cambiado es la responsabilidad del que lo redacta.


En ese periodo, desde los años 90 a hoy en día, se ha incrementado la población, la legislación, las ordenanzas municipales, se han incorporado nuevas administraciones con derecho a voz y voto. Pero hay algo que no se ha incrementado al mismo ritmo, el personal cualificado para la tramitación de estos cambios.

Me hace gracia cuando leo declaraciones de algún político o representante de la administración, los cuales desprecian a los técnicos que trabajamos en la calle, con la siguiente afirmación: “Los técnicos no hacen bien los proyectos”.

Estas afirmaciones suelen estar pronunciadas por los mismos perfiles que encargan informes para que un tercero nos diga lo que ya saben: trabajadores cualificaos, técnicos de la calle y usuarios. Nos ahorraríamos mucho dinero si nos preguntan a cualquier de estos grupos, es más, voy a sacar mi bola de cristal y haré la misma pregunta. Salió una pitonisa y me dijo que el principal problema es el exceso de legislación vigente y que cada semana se incrementa, la falta de personal cualificado que hace frente a este incremento continuo de legislación y no olvidemos la falta de comunicación entre departamentos, concejalías, consejerías, etc. por lo que para informar un proyecto deben saber normas que se encuentran en un armario y son del siglo pasado, además de conocer las normativas de distintas administraciones, por lo que los procesos se eternizan, seguramente sea mejor que lo diga alguien al que paguemos, ya que puede cambiar una coma de ubicación y redirigir lo mismo hacia otro lugar diferente.

Yo reto a cualquier iluminado que afirma que no sabemos hacer proyectos, a sacarlo de su zona de confort (Ayuntamiento) y que elija el municipio que quiera e intente realizar un proyecto, tendría muchas probabilidades de olvidar en el tintero alguna norma vigente y ser incorporado al grupo de técnicos que no sabemos hacer proyectos.


La queja sin propuesta de solución, es lo más fácil y habitual, pero si queremos salir entre todos de esta situación de colapso de lo que tenga que ver con la edificación y el urbanismo, donde incluyo ayuntamientos, consejerías, ministerios, particulares, etc, deberíamos empezar por dejar de poner parches a la legislación del siglo pasado, anulamos artículos y dejamos leyes antiguas en vigor mezcladas con nuevas, esto ocurre en todas las disciplinas, dejando leyes del siglo pasado, donde había menos habitantes, menos técnicos, menos solicitudes, y teníamos menos prisas. Solo recordar que el modelo ha cambiado y queremos todo para ayer, las compras por internet, las noticias, en general todo cuanto antes mejor, y choca frontalmente con los tiempos de la administración.

La semana pasada hablaba con un amigo sobre la inteligencia artificial (IA), él trabaja en la empresa privada, mi conversación se basaba en que hoy en día le puedo aportar a la IA todo tipo de leyes, informes internos, planes estratégicos, etc. y preguntar algo con toda esa información de base, la respuesta es inmediata. Pero mi amigo aún no se fía, me decía: Luis, yo tengo informes internos que son de la casa y si la IA los hace públicos, la competencia se podría beneficiar. Lo entendí, a día de hoy es difícil en determinados casos no aportar al sistema determinada información, aquí viene el pero, hay una empresa que esta situación no le afectaría ya que toda su documentación e informes son públicos, la empresa se llama administración, pues casualmente, es el único sitio donde no se habla de ella (IA) y donde más podría aportar. Podríamos poner los 103 Planes Generales de Ordenación Urbana (PGOU) de los municipios de la provincia, las distintas ordenanzas de los municipios, las normativas, leyes de las diferentes áreas sectoriales y Comunidades Autónomas, en definitiva todo aquello que interviene en la expedición de una licencia, también podríamos incorporar documentos llenos de telarañas del siglo pasado, todo esto para primero poder realizar lo mas simple que son las Informaciones urbanísticas, que por cierto no son ni vinculantes su resolución, pero demoran el trabajo de los técnicos que podrían estar realizando actividades más productivos para el desarrollo urbano de las ciudades.

Quedarnos solo con esta solución a corto plazo sería un error, seguiríamos ralentizando los procesos, por lo que usar la IA para agilizar debe ser el siguiente paso, que nos hiciese resúmenes de artículos y Leyes, limpieza de las normativas, unificación de criterios, etc., en definitiva, agilizar la carga de trabajo a los técnicos que informan para la administración y conceder la barita mágica a los técnicos de la calle para que aprendamos a realizar proyectos.

Como ciudadano siempre me ha costado entender que líneas imaginarias en el terreno, que hacen la función de limite municipal, y que al ciudadano afecta según su padrón, puedan tener tantas diferencias en conceptos básicos como el Urbanismo, me explico, cuando hablaba de 103 PGOU (Municipios de la provincia de Málaga) cada uno llama de una forma diferente a las distintas calificaciones del terreno residencial.

Ahora tenemos muchos la palabra sostenibilidad en boca, pero yo invitaría a todo político que hable de ella, a que me justifique la sostenibilidad de este colapso legislativo.

Vienen tiempos difíciles, ya que el ser humano intenta evitar los cambios, y más si los saca de su zona de confort, pero ha llegado IA para sacarnos los colores y mostrarnos la tela de araña que hemos realizado. Por ello creo que antes o después pondremos a jugar a IA y el cambio será abismal, con la posibilidad de convertir la insostenibilidad en sostenibilidad.

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