“El procedimiento seguido para promover esta ILP es un modelo de acción conjunta y continuada de los sectores más progresistas de Andalucía, más de 30 organizaciones de todo tipo”
OPINIÓN. Compromiso con Andalucía. Por José Antonio Jiménez Ramos
Coportavoz de Iniciativa del Pueblo Andaluz
21/11/22. Opinión. José Antonio Jiménez, docente jubilado y coportavoz de Iniciativa del Pueblo Andaluz (IdPA), escribe en su colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre la ratio escolar: “La bajada de ratio en este momento es la clave para que no haya justificación al cierre de unidades en centros públicos, dada la bajada de natalidad que seguirá afectando de manera muy especial en...
...los próximos años. La bajada de la natalidad debe servir para aumentar la calidad de la educación pública y no para disminuir las unidades de los centros públicos”.
Una conquista democrática
En tiempos de crisis de la política y de la acción comunitaria se recibe con mayor alegría, noticias como ésta que se ha producido esta misma semana. Se ha ido difundiendo durante semanas los obstáculos que se han colocado al desarrollo de la Iniciativa Legislativa Popular para la bajada de la ratio escolar. La última de ellas con una cierta premeditación y saltándose a la torera las costumbres procedimentales de este tipo de proceso.
https://youtu.be/NXyGi4nNlOY
Un pequeño resumen del mismo lo puede aclarar. Una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) es una posibilidad que tiene la sociedad andaluza para llevar al Parlamento una proposición para legislar en el ámbito de las competencias de Andalucía. Es un proceso complejo y largo, que en el caso que nos ocupa, se inició hace más de un año a través de una propuesta del sindicato USTEA y que pretende cambiar la Ley de Educación Andaluza en lo que se refiere a las ratios máximas por aula de las distintas etapas educativas.
Unos meses después la Mesa del Parlamento aceptó admitir la propuesta de USTEA que se presentó meses antes y en ese momento comienza el proceso para conseguir, al menos, 40.000 firmas apoyando la ILP. Durante todo este tiempo, primero se retrasó el comienzo de las firmas porque tardaron mucho los pliegos en entregarse por parte de la Junta Electoral y ello hizo perder un tiempo precioso que, como había ocurrido en otras ocasiones, debidamente justificadas ante la Mesa del Parlamento nuevo, deberían haber permitido una prórroga de tiempo para alcanzar el objetivo de las 40.000 firmas.
Sorprendentemente eso no ocurrió. El PP y Vox no facilitaron la prórroga en pleno mes de julio y se comunicó que las firmas deberían estar entregadas antes del 12 de agosto. En poco más de tres semanas hubo que culminar el proceso de recogida de firmas, ya que el final de curso escolar y el propio verano lo habían dejado en una pausa. Con todos estos inconvenientes, el 11 de agosto se entregaron en la Junta Electoral más de 52.000 firmas, que superaban con creces las necesarias 40.000.

El pasado 14 de noviembre la Junta Electoral comunicó a los proponentes que una vez revisadas las firmas solicitadas, se había sobrepasado el número necesario para que la ILP pasara a ser debatida en el pleno del Parlamento andaluz. Eso ocurrirá en el transcurso de los siguientes seis meses. La plataforma que coordina a los más de 30 colectivos que han estado trabajando todo este tiempo ha avanzado un peldaño más. Ahora toca esperar que la ILP se debata y se vote en el Pleno del Parlamento andaluz. Ello debe ocurrir en el plazo máximo de seis meses, contando solo para ello el tiempo hábil de funcionamiento del propio órgano. Todo ocurrirá antes del verano próximo. Es una decisión que debe tomar la Mesa del Parlamento.
¿Por qué es una conquista democrática todo lo ocurrido con la ILP de bajada de ratio? Por varias razones, por un lado porque el asunto es de primordial importancia, se juega el futuro de la educación pública en Andalucía. La bajada de ratio en este momento es la clave para que no haya justificación al cierre de unidades en centros públicos, dada la bajada de natalidad que seguirá afectando de manera muy especial en los próximos años. La bajada de la natalidad debe servir para aumentar la calidad de la educación pública y no para disminuir las unidades de los centros públicos, como viene ocurriendo desde hace varios años en Andalucía, antes del 2019 por la acción y dejación del PSOE y ahora por la decisión de los gobiernos de la derecha.
Por otro lado, el procedimiento seguido para promover esta ILP es un modelo de acción conjunta y continuada de los sectores más progresistas de Andalucía, más de 30 organizaciones de todo tipo, sin ninguna distinción de opinión o de sectores de la sociedad han estado y están trabajando para este asunto con una “anormalidad” ideal. Todas las dificultades habituales para no ponerse de acuerdo en otras cuestiones, han desaparecido gracias al objetivo común de todas ellas. ¿Hay algo más democrático que esto? Dejar a un lado las diferencias personales para el logro de un objetivo que afecta a la totalidad de la población que más necesita de los derechos públicos, debe ser tomado como modo de actuar social y políticamente, porque la democracia no es la victoria de la mayoría, sino el reconocimiento de que todas las opiniones encuentren su sitio en la decisión que se tome.
Hay, al menos, una tercera razón para justificar esta conquista democrática, se trata de una actividad que desborda, sin olvidar a las instituciones democráticas, a la democracia electoral, que busca una especie de justificación del voto. Cada equis tiempo se nos pide elegir democráticamente a las personas que nos representen en las instituciones, este trabajo, sin embargo, nos implica de manera continuada en la democracia porque nos hace activas siempre, no solo cuando toca. Y si además esa actividad llega a las instituciones con todo el trabajo que lo sustentan como cobertura de la acción social y política es un avance de profundización de la democracia.
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