Siguiendo el criterio político del PSOE central, que entiende por fin que es inasumible hipotecar el futuro de Málaga con esa mole, sobre todo por el rechazo popular, el grupo municipal presenta hoy en el pleno una moción pidiendo que el Consistorio asuma y no recurra el expediente que Cultura ha abierto para resolver si el rascacielos comete expolio del patrimonio cultural

El pleno de hoy es un resumen de las luchas vecinales que se dan en este ‘tardodelatorrismo’, típico final de mandato de un político caciquil como De la Torre, que quiere dejar un ‘legado social’ pero sin contar con los vecinos: el rascacielos del Puerto, la gasolinera de La Pelusa, la renaturalización del Guadalmedina, el ruido en el Centro, la Cueva de la Araña, el Jardín de la Concepción, etc…

OPINIÓN. Por Fernando Rivas
Editor de EL OBSERVADOR

08/10/21. Opinión. Sociedad. El PSOE de Málaga, encabezado por el grupo municipal de Dani Pérez en el Consistorio de la ciudad, cambia por fin definitivamente de posición respecto al rascacielos del Puerto empujado desde Madrid. Y es que desde el verdadero poder político central, por fin ha decidido que se diga: “No a ese edificio en ese sitio”. Y lo ha trasladado a la capital de la Costa...

...del Sol para que se actúe en consecuencia. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com.


Y es que Madrid ha tomado ya la decisión, empujado por los nuevos responsables políticos de los Ministerio de Cultura y Fomento, de no involucrarse en esta contienda, difícil de explicar. Considera inasumible hipotecar el futuro político (otra vez) de Málaga con esa mole a la entrada a la ciudad por mar, según fuentes del Ministerio de Cultura.

Por esta razón, el grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Málaga, que encabeza Dani Pérez, presenta hoy (leer AQUÍ) en el pleno atrasado del mes de septiembre, una moción urgente en la que pide que el Consistorio acepte el resultado del expediente en el que trabaja el Ministerio de Cultura para resolver si el rascacielos portuario comete un expolio del patrimonio cultural malagueño, y que no lo recurra de ninguna de las maneras, aunque el resultado sea afirmativo, lo que haría prácticamente inviable que el Consejo de Ministros aprobase una excepción a la Ley de Puertos para que se pudiera construir ese rascacielos para que fuera destinado a ser un hotel en el de Málaga, algo prohibido hasta ahora.

Según relatan a EL OBSERVADOR fuentes del Ministerio de Cultura, ya se ha establecido en el PSOE central un criterio político para el rascacielos, algo que ha costado más tiempo del necesario por informaciones poco correctas enviadas desde Málaga y que tendrán sis consecuencias. Pero ya ha tomado velocidad con la salida de Ávalos de Fomento, ministerios del que dependen los puertos del Estado. Y sobre todo con la llegada de Iceta a Cultura, que apuesta por rentabilizar social y políticamente todas las decisiones que se tengan que tomar respecto a las cuestione polémicas en las ciudades, alejándose de las posiciones del PP.


Pero sobre todo, tienen que hacer esto porque necesitan que en las grandes ciudades que quieren recuperar (sobre todo en Andalucía con su difícil apuesta por Espadas) y entre las que se cuenta Málaga, se note vecinalmente que quieren cambiar. Por lo que objetivos y personas serán los protagonistas de este necesario cambio. Lo del rascacielos es la última muestra de ello, y la otra moción que lleva el grupo socialista a este pleno, sobre la paralización del expediente para instalar una gasolinera en La Pelusa, es otra prueba.

Y es que el pleno de hoy es un claro resumen de las luchas vecinales que se dan en este momento de tardodelatorrismo. Es el típico final de mandato de libro de un político caciquil y dictador como Paco de la Torre, que quiere dejar un ‘legado social’ al futuro pero sin contar con los vecinos para nada, porque le molestan.

Así, las futuras batallas que se dan ya en las calles de Málaga, aparecen hoy en el pleno: el rascacielos del Puerto, que nadie excepto el PP quiere; la gasolinera de La Pelusa, entre las casas de los vecinos, que estos rechazan; la renaturalización del río Guadalmedina, que piden ecologistas y malagueños en general y que los cegatos concejales de De la Torre no consiguen encauzar; el ruido en el Centro y las sentencias favorables hacia los vecinos; la Cueva de la Araña y el secretismo municipal hacia este descubrimiento porque tampoco saben qué hacer con ella; el Jardín de la Concepción y su insensato comportamiento hacia este BIC primordial para la ciudad; el soterramiento faraónico; las monumentales y cada vez más abundantes torres de ricos que rodean los barrios populares; etc…

Es curioso ver como los conflictos vecinales se dan en los dos corners de Málaga, zonas Este y Oeste, barrios populares de trabajadores, mientras que en el Centro y Malagueta, no hay conflicto porque el Consistorio y sus concejales de distrito les conceden cualquier cosa que pidan.


La izquierda de verdad

Además del PSOE malagueño, a quien desde Madrid le han dicho que se ponga las pilas, hay una verdadera política progresista en la ciudad que impulsa Izquierda Unida, también desde el grupo municipal en el Consistorio, encabezada por la concejala Remedios Ramos. Ella ha firmado mociones y denuncias sobre todos los temas que hemos destacado. Bien apoyando mociones del PSOE, como las de hoy sobre el rascacielos o la de la gasolinera de La Pelusa, y otras muchas sobre el resto de temas polémicos a los que el PSOE sigue detrás: La Araña, La Concepción, El Guadalmedina, etc.

Ramos, concejala de IU en el Ayuntamiento de Málaga, explica que en el pleno van a presentar una moción para la renaturalización del Guadalmedina, en la que instan “al Consistorio a que se reúna con Ecologistas en Acción para ver los proyectos que tienen sobre esta renaturalización del río, para que saquen una propuesta y la eleven al Ministerio de Transición Ecológica”. Según Ramos el proyecto presentado por los ecologistas para el Guadalmedina “tiene un coste de unos 4,5 millones de euros, así que entendemos que pidiendo una subvención al Gobierno central se podría abordar”, ya que ha librado una partida presupuestaria de 60 millones para estas renaturalizaciones de ríos a su paso por ciudades. Además solicitan que en el presupuesto de 2022 esta acción tenga una partida propia y que sea “uno de los ejes centrales” en Málaga Expo Verde 2027.

Por otro lado, respecto a la sentencia que condena al Ayuntamiento por el ruido en la zona de centro de la ciudad, Ramos solicita que “se acate la sentencia y no se recurra. A los vecinos se les debe indemnizar por los daños causados”. También pide que se ponga en funcionamiento “la mesa donde estarían dichos vecinos, los hosteleros y el Ayuntamiento, a la que se comprometió el Consistorio cuando se declaró Zona Acústicamente Saturada”. Ramos exige “más control, más inspección. Que se cumplan las ordenanzas de vía pública, que el centro de Málaga no sea un urinario público, que se respeten las ordenanzas de convivencia, las ordenanzas sobre ruido y las ordenanzas de ocupación de vía pública”.

Izquierda Unida va a apoyar además las mociones que presenta el PSOE respecto a la gasolinera de La Pelusa, para que no se instale, y respecto al rascacielos del Puerto, para que se contemple el informe de Cultura que determinará que el rascacielos supondría un expolio para el paisaje.

Leer AQUÍ más informaciones relacionadas con el rascacielos del Puerto.