OPINIÓN. Por Carlos Taibo
Profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM)
25/10/11. Opinión. “Hubiera
dejado pasar la réplica (de la secretaria de comunicación de CCOO en Málaga) Carmen
Torres si en ella no se incluyesen dos afirmaciones que hacen pensar que este
sindicato tiene, a través de su persona, problemas graves de comunicación. La
primera, que quienes...
Profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM)
25/10/11. Opinión. “Hubiera
dejado pasar la réplica (de la secretaria de comunicación de CCOO en Málaga) Carmen
Torres si en ella no se incluyesen dos afirmaciones que hacen pensar que este
sindicato tiene, a través de su persona, problemas graves de comunicación. La
primera, que quienes...
OPINIÓN. Por Carlos Taibo
Profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM)
25/10/11. Opinión. “Hubiera
dejado pasar la réplica (de la secretaria de comunicación de CCOO en Málaga) Carmen
Torres si en ella no se incluyesen dos afirmaciones que hacen pensar que este
sindicato tiene, a través de su persona, problemas graves de comunicación. La
primera, que quienes no pensamos como ella deberíamos recibir atención
psiquiátrica. La segunda, que mi texto es patético”. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com publica
hoy la contrarréplica de Carlos Taibo en la polémica sobre “sindicalismo y 15-M”.
Respuesta de Carlos Taibo a la secretaria de comunicación de CCOO en Málaga, Carmen Torres. Sobre sindicatos, huelgas generales, movimientos y psiquiatría
CARMEN Torres, secretaria de comunicación de CCOO de Málaga, replica en las páginas de EL OBSERVADOR a un artículo mío sobre el sindicalismo y el movimiento 15-M. Hubiera dejado pasar sin más su réplica si en ella no se incluyesen dos afirmaciones que hacen pensar que CCOO de Málaga tiene, a través de su persona, problemas graves de comunicación. La primera es la aseveración de que quienes no pensamos como ella deberíamos recibir atención psiquiátrica. La segunda es la sugerencia de que mi texto, aquel que suscita la réplica de Carmen, es patético.
CREO que no mal resumo el contenido de la réplica de la señora Torres cuando recojo un argumento principal: el anticapitalismo y la autogestión son conceptos muy hermosos que están en los libros, pero nada tienen que ver con la realidad cotidiana (admitiré de buen grado que nada tienen que ver con la práctica cotidiana de su sindicato, que con tantos centenares de miles de afiliados y recursos sobrados sólo ha sido capaz de perfilar un magro proyecto autogestionario: una modesta agencia de viajes). Lo que la mencionada y cotidiana realidad nos enseña -prosigue Carmen- es que vivimos en el mejor de los mundos posibles, que es, por añadidura, el único existente. Llamativa tesis ésta que yo ya había escuchado en labios de los dirigentes de los dos grandes partidos políticos españoles y que abre el camino a una inequívoca conclusión: no hay otra posibilidad que la que nos ofrecen, con su cordura, los sindicatos mayoritarios, y ello pese a que en sus propias filas empiecen a despuntar las protestas de quienes -seguro que malinterpreto a Carmen Torres-, al emitirlas, se convierten, como yo, en candidatos a la psiquiatrización. Entre ellos, por cierto, muchos de quienes, treinta años atrás, lucharon por unas Comisiones Obreras que a duras penas pueden reconocerse en la triste deriva burocrática y agachacabeza de los últimos lustros. Tomo nota, de cualquier modo, del sentido de fondo de un argumento que condena al manicomio -ya lo he adelantado- a quien no piensa como uno.
CARMEN Torres agrega que nuestros sindicatos mayoritarios lo son por libre decisión de los
trabajadores. ¡Caramba! Ocurre lo mismo con los partidos
mayoritarios, que todo el mundo sabe no se benefician de hondos privilegios,
oscuros trapicheos con los poderes económicos, sesgados medios de
incomunicación y trampas legales por doquier. Al leer el texto de la réplica me
ha venido a la cabeza la urgente necesidad de acopiar información sobre el
juego sucio al que a menudo se han entregado CCOO y UGT, a los impresentables
pactos que algunos de sus cuadros han alcanzado con las direcciones de las
empresas y al acallamiento permanente de la contestación interna. ¿O es que en
Comisiones fue posible discutir, por ejemplo, el infame Tratado Constitucional
de la Unión Europea
que se nos impuso, por libre decisión, desde los estamentos de poder?
OJO, por lo demás, con las mayorías que defiende la amiga Carmen, que con un curioso e hiperdemocrático criterio parecen interpretar que todo aquello que no son ellas rezuma enfermedad, sectarismo y vanguardias alejadas del mundo (como la que mi replicante aprecia en una posible deriva del 15-M). Al parecer, y en cambio, no hay ningún problema con los aparatos que se mueven por su cuenta, y ello pese a que se acumulan los datos que los sitúan cada vez más alejados de unos enfermos que, vaya por dónde, cada vez son más numerosos. Al menos eso es lo que invita a concluir la patética manifestación -4.000 personas- que los sindicatos mayoritarios convocaron en septiembre en Madrid para rechazar la impresentable reforma constitucional alentada por socialistas y populares. Más o menos la misma cifra de personas que sacó a la calle el pasado día 19 el movimiento 15-M…
HA leído mal Carmen, en fin, mi texto. No reivindico una huelga general sin trabajadores: me limito a señalar que en una huelga general hay, también, otros elementos que merece la pena sopesar. Aunque, puestos en eso, le reconoceré que desde el lugar que ocupa por fuerza algo más sabe que yo de huelgas generales sin trabajadores: la del 29 de septiembre del pasado año en mucho recuerda a ese triste y provocador oxímoron. Nadie propone, en suma, una huelga general indefinida, y no por falta de ganas y de motivos, sino porque, pese a nuestra aparente falta de cordura, sabemos dónde estamos. Bueno sería que pudiesen decir lo mismo las cúpulas de CCOO y UGT, que por lo que cabe entender no aprecian en estas horas, con la que está cayendo, problema alguno que justifique la convocatoria de una huelga general. Ah, y por cierto, ni todos los sindicatos dependen, como lo sugiere Carmen, de la teta del Estado ni las dependencias de los demás alcanzan los niveles de las que exhiben CCOO y la UGT.
LA señora Torres señala que mi texto es patético. Yo no diré -soy muy respetuoso- que lo es su réplica. Me contentaré con afirmar que lo que resulta patético es el mundo que retrata. Y con certificar -también lo he adelantado- que CCOO de Málaga tiene problemas, y graves, de comunicación. Igual, y a tono con los tiempos que corren, algún becario sin sueldo podría ayudar a resolverlos.
PUEDE ver aquí los artículos cruzados en esta polémica:
- 20/10/11 Respuesta al artículo de Carlos Taibo ‘Sindicalismo y 15M’: “¿Por qué quienes piensan en una huelga general indefinida no la convocan?”
- 18/10/11 Sindicalismo y 15-M
PUEDE ver aquí anteriores artículos de colaboración de Carlos Taibo:
- 18/10/11 Sindicalismo y 15-M
- 15/09/11 Déficits y trampas: gobernantes culpables
- 08/07/11 La progresía y el movimiento 15-M
- 28/06/11 El otoño del movimiento 15-M
- 22/06/11 Acoso sobre el movimiento 15-M
- 15/06/11 Los medios y el movimiento 15-M
- 07/06/11 Sobre el programa del movimiento 15-M
- 01/06/11 El futuro del movimiento 15-M
- 19/05/11 Palabras del 15 de mayo
- 19/05/11 Palabras del 15 de mayo
- 11/05/11 En homenaje a Ramón
- 22/02/11 Mesas de convergencia: por qué no he firmado
- 03/02/11 Una farsa con cuatro actores
- 26/01/11 Dos diagnósticos sobre la crisis
- 12/01/11 El AVE de Blanco
- 10/12/10 Estado de alarma
- 11/11/10 La CNT cumple 100 años
- 05/11/10 Marcelino Camacho: un café, dos madalenas
- 21/09/10 Con la huelga, sí, pero
- 22/07/10 169 diputados
- 15/07/10 ¿Todos con ‘la roja’? Sobre un momento histérico
- 22/06/10 Crisis energética, intereses privados, decrecimiento
- 15/06/10 Menos mal que nos queda el AVE
- 27/05/10 Sobre el programa de ajuste de los socialistas españoles
- 22/04/10 Garzón, ¿un héroe antifascista?
- 25/03/10 Gracias, Pepín
- 25/02/10 Ojo con las renovables
- 25/11/09 Detractores del decrecimiento
PUEDE ver aquí otras noticias relacionadas con Carlos Taibo:
- 17/11/09 Paco Puche entrevista a Carlos Taibo: “O decrecemos por las buenas o lo haremos por las malas: el capitalismo se hunde”
- 30/10/09 El experto en política internacional Carlos Taibo encabeza el programa de las II Jornadas sobre Decrecimiento de Ecologistas en Acción
Profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM)
25/10/11. Opinión. “Hubiera
dejado pasar la réplica (de la secretaria de comunicación de CCOO en Málaga) Carmen
Torres si en ella no se incluyesen dos afirmaciones que hacen pensar que este
sindicato tiene, a través de su persona, problemas graves de comunicación. La
primera, que quienes no pensamos como ella deberíamos recibir atención
psiquiátrica. La segunda, que mi texto es patético”. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com publica
hoy la contrarréplica de Carlos Taibo en la polémica sobre “sindicalismo y 15-M”.Respuesta de Carlos Taibo a la secretaria de comunicación de CCOO en Málaga, Carmen Torres. Sobre sindicatos, huelgas generales, movimientos y psiquiatría
CARMEN Torres, secretaria de comunicación de CCOO de Málaga, replica en las páginas de EL OBSERVADOR a un artículo mío sobre el sindicalismo y el movimiento 15-M. Hubiera dejado pasar sin más su réplica si en ella no se incluyesen dos afirmaciones que hacen pensar que CCOO de Málaga tiene, a través de su persona, problemas graves de comunicación. La primera es la aseveración de que quienes no pensamos como ella deberíamos recibir atención psiquiátrica. La segunda es la sugerencia de que mi texto, aquel que suscita la réplica de Carmen, es patético.
CREO que no mal resumo el contenido de la réplica de la señora Torres cuando recojo un argumento principal: el anticapitalismo y la autogestión son conceptos muy hermosos que están en los libros, pero nada tienen que ver con la realidad cotidiana (admitiré de buen grado que nada tienen que ver con la práctica cotidiana de su sindicato, que con tantos centenares de miles de afiliados y recursos sobrados sólo ha sido capaz de perfilar un magro proyecto autogestionario: una modesta agencia de viajes). Lo que la mencionada y cotidiana realidad nos enseña -prosigue Carmen- es que vivimos en el mejor de los mundos posibles, que es, por añadidura, el único existente. Llamativa tesis ésta que yo ya había escuchado en labios de los dirigentes de los dos grandes partidos políticos españoles y que abre el camino a una inequívoca conclusión: no hay otra posibilidad que la que nos ofrecen, con su cordura, los sindicatos mayoritarios, y ello pese a que en sus propias filas empiecen a despuntar las protestas de quienes -seguro que malinterpreto a Carmen Torres-, al emitirlas, se convierten, como yo, en candidatos a la psiquiatrización. Entre ellos, por cierto, muchos de quienes, treinta años atrás, lucharon por unas Comisiones Obreras que a duras penas pueden reconocerse en la triste deriva burocrática y agachacabeza de los últimos lustros. Tomo nota, de cualquier modo, del sentido de fondo de un argumento que condena al manicomio -ya lo he adelantado- a quien no piensa como uno.
CARMEN Torres agrega que nuestros sindicatos mayoritarios lo son por libre decisión de los
trabajadores. ¡Caramba! Ocurre lo mismo con los partidos
mayoritarios, que todo el mundo sabe no se benefician de hondos privilegios,
oscuros trapicheos con los poderes económicos, sesgados medios de
incomunicación y trampas legales por doquier. Al leer el texto de la réplica me
ha venido a la cabeza la urgente necesidad de acopiar información sobre el
juego sucio al que a menudo se han entregado CCOO y UGT, a los impresentables
pactos que algunos de sus cuadros han alcanzado con las direcciones de las
empresas y al acallamiento permanente de la contestación interna. ¿O es que en
Comisiones fue posible discutir, por ejemplo, el infame Tratado Constitucional
de la Unión Europea
que se nos impuso, por libre decisión, desde los estamentos de poder? OJO, por lo demás, con las mayorías que defiende la amiga Carmen, que con un curioso e hiperdemocrático criterio parecen interpretar que todo aquello que no son ellas rezuma enfermedad, sectarismo y vanguardias alejadas del mundo (como la que mi replicante aprecia en una posible deriva del 15-M). Al parecer, y en cambio, no hay ningún problema con los aparatos que se mueven por su cuenta, y ello pese a que se acumulan los datos que los sitúan cada vez más alejados de unos enfermos que, vaya por dónde, cada vez son más numerosos. Al menos eso es lo que invita a concluir la patética manifestación -4.000 personas- que los sindicatos mayoritarios convocaron en septiembre en Madrid para rechazar la impresentable reforma constitucional alentada por socialistas y populares. Más o menos la misma cifra de personas que sacó a la calle el pasado día 19 el movimiento 15-M…
HA leído mal Carmen, en fin, mi texto. No reivindico una huelga general sin trabajadores: me limito a señalar que en una huelga general hay, también, otros elementos que merece la pena sopesar. Aunque, puestos en eso, le reconoceré que desde el lugar que ocupa por fuerza algo más sabe que yo de huelgas generales sin trabajadores: la del 29 de septiembre del pasado año en mucho recuerda a ese triste y provocador oxímoron. Nadie propone, en suma, una huelga general indefinida, y no por falta de ganas y de motivos, sino porque, pese a nuestra aparente falta de cordura, sabemos dónde estamos. Bueno sería que pudiesen decir lo mismo las cúpulas de CCOO y UGT, que por lo que cabe entender no aprecian en estas horas, con la que está cayendo, problema alguno que justifique la convocatoria de una huelga general. Ah, y por cierto, ni todos los sindicatos dependen, como lo sugiere Carmen, de la teta del Estado ni las dependencias de los demás alcanzan los niveles de las que exhiben CCOO y la UGT.
LA señora Torres señala que mi texto es patético. Yo no diré -soy muy respetuoso- que lo es su réplica. Me contentaré con afirmar que lo que resulta patético es el mundo que retrata. Y con certificar -también lo he adelantado- que CCOO de Málaga tiene problemas, y graves, de comunicación. Igual, y a tono con los tiempos que corren, algún becario sin sueldo podría ayudar a resolverlos.
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