OPINIÓN. La fachada indiscreta. Por Anton Iván Ozomek Fernández
Geógrafo y autor del blog ‘Edifeicios’
18/06/14. Opinión. Anton Ozomek analiza en este artículo en EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.comcómo los intereses económicos se enfrentan a veces a los culturales centrándose en el Hospital de SantoTomás de Málaga, que pese a ser poco conocido, se configura como “uno de los monumentos más importantes de nuestra ciudad, con una gran riqueza patrimonial, histórica y artística”, a pesar de lo cual no ha conseguido tener un alto grado de conservación por parte del Obispado.
Obras frente a frente: del Hospital de Santo Tomás a la Iglesia del Santo Cristo de la Salud de Málaga
EL mundo del cine ha sido prolífico a la hora de mostrarnos películas cuyo eje central es el enfrentamiento de dos personajes cuyo baile de diferencias y similitudes suele encerrar siempre alguna lección moral más o menos explícita.
CON el patrimonio histórico de Málaga, en cierto modo, ocurre igual y en estos días tenemos además la suerte de poder contemplar en directo la ‘batalla’ entre dos formas de entender las actuaciones sobre edificios centenarios que, producto del abandono más o menos deliberado, se encontraban en un estado de deficiente conservación.
POR una parte –sigamos con el símil cinematográfico y sepan perdonar por tanto la excesiva simplificación que el guión exige–, haciendo el papel del ‘malo’, tenemos a la institución privada de la Diócesis de Málaga, con la interpretación estelar del obispo Sr. Jesús Catalá Ibáñez, personaje oscuro y críptico donde los haya, y en cuyo poder reside el enigmático futuro del Hospital de Santo Tomás.
POR otra parte, y por primera vez haciendo el papel del ‘bueno’, tenemos a la institución pública de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, que aunque está interpretado por varios actores, entre ellos destaca –por su elevada calidad profesional y humana– el Sr. Antonio Martín Pradas, técnico del IAPH (Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico) y coordinador del Plan de comunicación y difusión del proyecto “Obra abierta” de la Iglesia del Santo Cristo de la Salud de Málaga.
A pesar de que es un gran desconocido para malagueños y visitantes, el Hospital de Santo Tomás es uno de los monumentos más importantes de nuestra ciudad, con una gran riqueza patrimonial, histórica y artística, cuyo devenir arranca en el siglo XVI como institución benéfica, fundada en 1505 por el Caballero Diego García de Hinestrosa –cuyos restos reposan aún hoy en el edificio–. El inmueble vio pasar los siglos hasta que fue gravemente dañado por el gran terremoto de 1884, resultando que la demolición era la única solución por la situación de riesgo de colapso y desplome de la estructura.
ESO sí, consciente del gran valor del edificio –incluso en una época en que por supuesto no existía ninguna Ley de protección del Patrimonio Histórico– el arquitecto Juan Nepomuceno Ávila, constándole no pocos quebraderos de cabeza, se empeñó en reconstruirlo reutilizando todos los elementos posibles del original, a la vez que adoptando un estilo que respetara al máximo el origen mudéjar del inmueble.
Y sin duda lo consiguió pues hoy en día podemos contemplar –a pesar de la gruesa capa de suciedad adherida a la fachada– un soberbio ejemplo de arquitectura historicista que crea un conjunto inigualable con la vecina portada gótica de la Iglesia del Sagrario.
PERO no solo es fachada este inmueble pues en el interior se acumulan también no pocas muestras de riqueza patrimonial, sobre todo un magnífico artesonado mudéjar, original del siglo XVI, y también la excelente arquitectura interior decimonónica rematada por una soberbia fachada de carpintería de madera acristalada en patios y galerías.
LA monumentalidad de este edificio, sin embargo, parece no haber sido suficiente para contar con el máximo grado de protección jurídica y tan solo se encuentra inscrito en el Catálogo General del Patrimonio Histórico andaluz, pero sin consideración de Bien de Interés Cultural singular. A efectos prácticos, esta condición significa que podría ser demolido por completo manteniendo tan solo los muros de la fachada a calle Santa María, tal cual ya le ocurrió a otro magno edificio malagueño recientemente desaparecido: el Palacio del Marqués de Solecio (también conocido como de los Gálvez y del Marqués de la Sonora) cuya triste e indignante historia ya relatamos con anterioridad en esta misma sección de La Fachada Indiscreta.
http://vimeo.com/79619878
ATENDER caritativamente a enfermos crónicos sin recursos fue el uso que el Hospital de Santo Tomás tuvo durante los últimos quinientos años pero el obispo de Málaga consideró en diciembre de 2012 –fecha en que oficialmente pasa a ser de propiedad diocesana– que ya era momento de obtener algún lucro y aunque no realizó un anuncio oficial, fuentes que deben mantenerse en el anonimato pero que son suficientemente fiables, confirmaron que se tanteó la posibilidad de demoler por completo el interior y construir un hotel.
NO sería la primera vez que el Obispado malagueño participa en un típico proceso de especulación inmobiliaria: recuérdese la iglesia de La Merced, donde hoy se levanta un edificio de arquitectura ‘moderna’ (de horrible estilo ‘Internacional’) que fue hace pocos años ‘maquillado’ para evitar el pésimo contraste que ofrecía su ‘sinceridad racionalista’ respecto a las vecinas edificaciones históricas, tratando de mejorar así un poco la imagen urbana de cara al creciente turismo en torno a la Casa natal de Picasso.
LA filtración de estos planes del Obispado sobre el Hospital de Santo Tomás llegó a la plataforma ciudadana por la defensa del patrimonio malacitano, Torre Vigía, que desató una activa campaña de denuncia en redes sociales. Se logró así por fin una primera declaración oficial del Obispado, que hasta el momento y tras diez meses de silencio había considerado que este era un asunto estrictamente privado sobre el que los malagueños no tenían nada que decir. Se desconoce si el miedo a una opinión ciudadana en contra hizo cambiar los planes originales, pero lo cierto es que se logró el compromiso público de que el edificio, según nota de prensa publicada en el sitio web corporativo de la Diócesis de Málaga en octubre de 2013, sería ‘rehabilitado’ dentro del Plan Director de la Catedral, para posiblemente albergar el archivo histórico diocesano.
EL Sr. Jesús Catalá, no obstante, desoyó las razonables peticiones para que se permitiera el acceso al inmueble para constatar el supuesto estado de ruina que declaraba en la referida nota de prensa, y solo después de cuatro meses, en enero de 2014, permitió por fin el acceso a un periodista de La Opinión de Málaga que publicó cinco fotografías del interior del inmueble, aunque ninguna precisamente de los bienes patrimoniales declarados en ruina según criterio del obispo.
CONSTATAR de modo público la supuesta ruina es una necesidad imperiosa para cualquiera que quiera evitar lógicas suspicacias en una ciudad donde la demolición de estructuras arquitectónicas de edificios históricos en perfecto estado de conservación es una práctica habitual, para así permitir una total libertad de acción al proyectista del nuevo uso. Más aún cuando el Sr. Jesús Catalá ha empleado ya varias veces el término ‘rehabilitación’ a pesar de que la vigente normativa municipal (PGOU-PEPRI) determina con total claridad que en los inmuebles sometidos a Protección Integral no se podrán llevar a cabo obras de rehabilitación sino tan solo de restauración, que aunque puedan parecer términos similares, no lo son en absoluto.
HA transcurrido ya un año y medio desde que el Hospital de Santo Tomás pasara a manos de la Diócesis de Málaga, pero las autoridades competentes en materia urbanística y de protección del Patrimonio Histórico (Junta de Andalucía y Ayuntamiento de Málaga) siguen aún sin pronunciarse públicamente al respecto de las denuncias ciudadanas sobre esta cuestión. Es la ley del silencio al estilo de la ‘cosa nostra’.
JUSTO lo contrario, como la noche al día, es lo acontecido con las obras de restauración iniciadas en diciembre de 2013 en la Iglesia del Santo Cristo de la Salud, pues no solo se ha permitido el acceso de varios cientos de ciudadanos al edificio en obras, sino que existe un blog donde el técnico del IAPH, Sr. Martín Pradas, nos ha ofrecido de modo constante abundante información sobre cada paso en el avance de los trabajos de restauración, a punto ya de concluir este mes de junio de 2014.
LA iniciativa “Obra abierta” está impulsada por la Junta de Andalucía, a través del IAPH y la Fundación Especial Caja Madrid. Los objetivos son, en primer lugar, difundir entre amplios sectores de población la importancia histórica-artística de este edificio declarado Bien de Interés Cultural singular, dando a conocer su proyecto de restauración para la mejor conservación del Patrimonio y, en segundo lugar, concienciar a la sociedad sobre su responsabilidad con el patrimonio heredado y sobre los problemas que plantea su conservación para las generaciones futuras.
ESTE ejercicio de total transparencia en una intervención sobre el Patrimonio Histórico es pionero en nuestra ciudad y por ello, por demostrar que una administración pública puede hacer tan bien las cosas, haciendo partícipes a los malagueños y evitando en consecuencia cualquier suspicacia o temor ante lo que le pudiera ocurrir a este importante monumento, se les debería brindar un mayor reconocimiento ya que sin duda esta es la línea comunicativa que todas las AA.PP. deberían adoptar en materia de intervención sobre el Patrimonio Histórico. Nuestra más sincera enhorabuena, por tanto, para el Sr. Martín Pradas y el IAPH. Y nuestro completo rechazo a la actitud oscurantista del Sr. Catalá Ibáñez y la Diócesis de Málaga.
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FOTOGRAFÍAS:
Foto 1: Fachada del Hospital de Santo Tomás. (Fuente: Anton Ozomek)
Foto 2: Placa conmemorativa en el Hospital de Santo Tomás. (Fuente: Anton Ozomek)
Vídeo: (Fuente: Óscar Hilillo en http://vimeo.com/79619878)
Foto 3: Antonio Martín Pradas guiando una de las visitas guiadas a las obras de restauración de la Iglesia del Santo Cristo de la Salud de Málaga. (Fuente: Blog del proyecto http://santocristomalaga.blogspot.com)
Foto 4: Panorámica del centro de Málaga desde el exterior de la cúpula de la Iglesia del Santo Cristo de la Salud de Málaga. (Fuente: Blog del proyecto http://santocristomalaga.blogspot.com).
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