OPINIÓN. Ponte en forma. Por Eduardo L. Quintanilla Guzmán
Especialista en Fisiología del Ejercicio

01/04/13. Opinión. El especialista en Fisiología del Ejercicio y entrenador personal, Eduardo L. Quintanilla, vuelve a su colaboración habitual con EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. En el artículo que sigue, detalla algunos aspectos claves a la hora de respirar, un proceso biológico “subestimado” sobre todo en las culturas occidentales. “Muchos respiramos mal, particularmente cuando hacemos ejercicio. Eso que implica una fatiga prematura, el debilitamiento de la musculatura pélvica o un incremento de la presión intratorácica, lo que acaba afectando a la presión arterial por cambios en el retorno venoso”. Pinche AQUÍ para consultar el blog de Quintanilla.

Las claves de la respiración. Un par de técnicas para mejorar tu rendimiento

AUNQUE todos sabemos de la importancia de la respiración para nuestras vidas, en la cultura occidental es poco lo que se conoce al respecto. Muy diferente a las culturas orientales, que revisten concepciones más amplias de este proceso biológico.

MUCHOS respiramos mal, particularmente cuando hacemos ejercicio. Eso que implica una fatiga prematura, el debilitamiento de la musculatura pélvica o un incremento de la presión intratorácica, lo que acaba afectando a la presión arterial por cambios en el retorno venoso.

EN los ejercicios de fuerza en general siempre se recomienda exhalar al realizar el esfuerzo, pero recuerda al inhalar no tomar todo el aire del gimnasio: a la cuarta respiración notaras un gran mareo debido a la hiperventilación. Siempre debes respirar con naturalidad. También es muy recomendable no contener la respiración, en especial si levantas grandes pesos, por lo anteriormente mencionado del perjuicio del retorno venoso hacia el corazón.

AL realizar los abdominales, siempre exhala al subir, nunca mantengas la respiración, y de ser posible activa la musculatura más profunda del abdomen de modo que no observes que sube.

UNA de las relaciones más aceptadas en la actividad física es la de la respiración y la relajación. No podríamos entender una sin la otra. Su importancia para nuestra calidad de vida está subestimada. El ritmo de vida moderno muchas veces nos impide tomar un momento para relajarnos, pero a diferencia de lo que podemos pensar, para esto no hace falta ni mucho tiempo, ni una clase de yoga. Basta con unos minutos.

TOMA un momento para relajarte.

BUSCA una posición cómoda, cierra los ojos un momento y concéntrate en la respiración, tratando de inhalar y dejando que la exhalación sea suave. Acompáñala con la relajación de las partes del cuerpo que notes más tensas. Repítelo varias veces. También puede resultar útil usar la imaginación, pensando en lugares que nos manifiesten tranquilidad y calor.

EL ambiente puede ayudarnos con una iluminación suave y acorde a la hora del día. También la pureza del aire. Por ejemplo, al lado del mar. Resulta importante. Intenta por un instante tener solo pensamientos positivos, ver la vida con optimismo. Es muy posible que después de la relajación con la respiración acorde, al abrir los ojos las cosas sean mejor.

Eduardo L Quintanilla Guzmán
Especialista en Fisiología del Ejercicio y entrenador personal
www.educoach1.blogspot.com.es

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