En un pleno que duró tres minutos ganó 250 euros. Este mes cobrará en extras 2.000 solo por sacarle brillo al dedo y votar sí, sin hacer nada. Todo esto es además del sueldo de 93.000 euros que cobra en la Diputación de Málaga
En un artículo de Ángel Recio, en ‘Málaga Hoy’, titulado muy acertadamente “Juan Cassá: el Messi del Ayuntamiento de Málaga”, se explica todo perfectamente. Hay que leerlo
Los políticos de Ciudadanos, Maldonado en Diputación y Losada en el Consistorio, rezan para que los malagueños no se acuerden de que dieron un ultimátum al PP hace ya ¡5 meses!: ”Oye, que vamos a hacer algo terrible como no echéis a Cassá del equipo de Gobierno”. Una actitud vergonzosa en la que el buen sueldo que cobran ellos es lo primero. Creen que pueden estirar la cosa tres años más sin necesidad de tomar ninguna medida. Solo tienen que repetir de vez en cuando: “Oye, que vamos a…”22/10/20. Opinión. La complicidad de Ciudadanos, con la edil Noelia Losada tapándose la nariz y mirando para otro lado, permite que el edil tránsfuga Juan Cassá desplume a los malagueños. El pasado martes 20 estuvo un rato en el Ayuntamiento y cobró 83 euros por minuto. En un pleno de trámite que duró tres ganó 250 euros. Este mes cobrará en extras 2.000 solo por sacarle brillo al dedo y votar...
...sí, sin hacer nada de nada. Todo esto es además del sueldo de 93.000 euros que cobra en la Diputación de Málaga. Vamos, que se pone en más de 100.000 euros al año. Una información de EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com.
En un artículo de Ángel Recio (AQUÍ), que publica en Málaga Hoy y que titula muy acertadamente, “Juan Cassá: el Messi del Ayuntamiento de Málaga”, se explica todo perfectamente. Hay que leerlo AQUÍ.Hacia la derecha: Díaz, Cassá, Díaz, Cassá y otro
Ciudadanos y la falta de dignidad
Los dos políticos de Ciudadanos con poder en la capital, Maldonado en Diputación y Losada en el Consistorio, rezan para que los malagueños no se acuerden de que dieron un ultimátum al PP hace ya ¡5 meses!: ”Oye, que vamos a hacer algo terrible como no echéis a Cassá del equipo de gobierno de la Diputación”. Una actitud vergonzosa en la que el buen sueldo que cobran es lo primero. Creen que pueden estirar la cosa tres años más sin necesidad de tomar ninguna medida. Solo tienen que repetir de vez en cuando: “Oye, que vamos a…”.
Pero no solo es vergonzoso que Cs, el partido autollamado de la regeneración permita esto, es que se trata de la mayor tomadura de pelo hecha al electorado de Málaga y le han hecho muchas. Tres políticos profesionales: Juan Cassá, Noelia Losada y Juan Carlos Maldonado, demuestran todos los días que son capaces de matar con tal de no dejar su puesto alimentario y poder seguir cobrando del dinero público, en una muestra de desprecio total por la democracia, los vecinos y sobre todo por la dignidad que no tienen.
De estos tres políticos que se presentaron bajo las siglas de Ciudadanos en las últimas elecciones municipales en mayo de 2019, Cassá se mudo al PP para darle la mayoría que necesitaba en el Ayuntamiento a cambio de que lo metiera en el equipo de gobierno de la Diputación y poder cobrar más de 100.000 euros al año junto con lo que saca de sus chapucillas en el Ayuntamiento, una pasta. Noelia Losada entró en el equipo de gobierno del PP en el Consistorio de Málaga porque también necesitan su voto, pero por mucho menos dinero. Y Juan Carlos Maldonado hizo lo propio en la Diputación para poder seguir cobrando una buena cantidad de dinero público como vicepresidente y portavoz del grupo de Cs de un solo miembro, él.
Ciudadanos presentó en su lista al Ayuntamiento de Málaga a Juan Cassá el primero. Para alcalde, vamos. Cuando todo el mundo sabía que es un político inútil sin conocimiento alguno de la ciudad y sin capacidad para gestionar cualquier situación que no se refiera a el mismo. Lo ponen el primero a pesar de la bronca interna que hubo dentro de Cs Málaga para que no fuera porque nadie lo quería. Pero el firme y abierto apoyo del actual coordinador de Ciudadanos en la provincia, su amigo, el congresista Guillermo Díaz, aunque ahora lo niegue (algo habitual en él) fue decisivo. Lo hizo tan mal que de los tres concejales que tenia Cs pasaron a dos. El y Noelia Losada. Es decir, aunque el partido naranja quiere escurrir el bulto y apartarse de la responsabilidad, los únicos culpables de que Cassá esté en donde está son los dirigentes de Ciudadanos. Maldonado salió concejal por Mijas.Hacia la derecha: Cassá, Díaz, Cassá, Díaz y otro
Al PP le hacen falta dos votos para tener la mayoría en el Consistorio de Málaga y uno en la Diputación. Así que pacta con Cs y Losada entra a formar parte del equipo de gobierno del Ayuntamiento, y le dan una concejalía de esas chuchurrías. Y Cassá, el otro concejal de Cs en el Consistorio se va al ente provincial junto con Maldonado, que viene de Mijas. Con el apoyo de uno solo de los dos diputados de Cs, el PP continúa con mayoría en esta última institución.
Pero todo cambia cuando en mayo de 2020 Cassá, harto de que los naranjas pasen de él y por supuesto lejos de una honrada renuncia al acta, lo que renuncia es a su formación naranja en un acto de transfugismo de libro. El PP dice que lo mete en el equipo de gobierno de Diputación para dar sombra al botijo pero ganando casi 100.000 euros, a cambio Cassá votará siempre que sí a lo que diga el PP allí y sobretodo en el Ayuntamiento, en el que su voto es decisivo junto con el de Losada para que el PP tenga mayoría.
Los populares le dieron a Cassá todo lo que pidió, por supuesto, aunque solo se hizo público una parte del acuerdo. Es la parte más evidente e imposible de tapar como la nómina, dietas, extras y esas cosas que ponen su sueldo por encima de los 100.000 euros anuales contando las dos instituciones. Al ocurrir esto, Maldonado, en la Diputación, sacó su honra y sus principios y dijo que iba a hacer lo divino y lo humano, y amenazó al PP con algo que nunca concretó, si no echaban al tránsfuga del equipo de gobierno provincial. Evidentemente nunca ha hecho nada porque no tiene ningún poder para presionar en la Diputación ni en ningún otro sitio, ya que con el voto de Cassá allí es suficiente para el PP.
Maldonado es de los marxistas línea Groucho. De aquellos de “Estos son mis principios y si no te gustan tengo otros”. Así que desde mayo de este año, desde hace ¡5 meses!, está diciendo que va a hacer no se qué como Cassá siga en el equipo de gobierno. ¿Qué ha hecho?... nada. Pero sí ha seguido cobrando su buen sueldo como vicepresidente de la entidad, más otra pasta por ser portavoz del grupo de Cs que es él solo, (un grupo de uno es algo asombroso, pero…), más otra parte que cobra como concejal de Mijas, más otras regalías como miembro de empresas o lo que sea. Debe cobrar casi como Cassá. Aunque eso no supongo escándalo para él. ¿Cómo va ni a pensar en cualquier cosa que ponga en peligro su sueldazo? Con repetir cada cierto tiempo eso de que va hacer algo, es suficiente. De todas formas él piensa que los malagueños somos idiotas y que no nos enteramos de papa. Es el pensamiento y la palabra de un político profesional y todos saben lo que vale eso. Nada.
La revista EL OBSERVADOR ofrece a continuación el artículo de Ángel Recio (AQUÍ) íntegro a sus lectores por su interés. Puede leerlo en su fuente original, Málaga Hoy, AQUÍ.
Juan Cassá: el Messi del Ayuntamiento de Málaga
El concejal no adscrito se embolsó ayer [por el martes 20] 500 euros por asistir a un pleno de tres minutos y una comisión
No habla en los plenos, no presenta medidas, pero el dedo con el que vota le permite al PP mantener la alcaldía en uno de los principales ayuntamientos de España y eso hay que pagarlo, con la salvedad de que el dinero es público. El concejal no adscrito Juan Cassá se embolsó ayer 500 euros por asistir a un pleno extraordinario en el Ayuntamiento de Málaga que duró, literalmente, tres minutos y previamente a una comisión de economía que se prolongó un poco más de una hora. Es el Messi del Consistorio, pues cobra los minutos a precio prácticamente de oro con la particularidad además de que no requiere ningún protagonismo, solo decir que sí a lo que propone el PP en el momento de la votación. También podría votar en contra, aunque Cassá ya dijo en su única intervención en el Pleno municipal -allá por julio- que era leal a Francisco de la Torre.
La jornada de ayer fue redonda para el asturiano. Hubo una comisión de pleno extraordinaria de Economía para tratar, entre otros aspectos, el plan económico-financiero propuesto por el equipo de gobierno -formado por el PP y Ciudadanos- para los años 2020 y 2021 como exigencia legal tras haber superado en 2019 la regla de gasto en 12 millones de euros. La comisión tuvo algunos momentos tensos. Cassá asistió y cobrará 250 euros por ello.
Unos minutos más tarde, pasado el mediodía, se había convocado el pleno extraordinario para aprobar ese plan económico. Como ya se había debatido todo y cada partido había expuesto su versión, el pleno duró tres minutos de reloj, lo que se tardó en votar varios puntos. Cassá tampoco habló, pero sí votó a favor del PP en los puntos correspondientes y la tasa por asistir a un pleno extraordinario son otros 250 euros. Cada minuto de Cassá en el pleno extraordinario les salió a los contribuyentes por 83 euros. Una mañana bastante provechosa para Cassá, que ya ingresa 93.000 euros anuales por ser portavoz del equipo de gobierno en la Diputación y como concejal.
Este mes de octubre ganará 2.000 euros extra a su buen sueldo en la Diputación
Los cobros extra nunca vienen mal y Cassá se va a hinchar este mes. Al no tener dedicación exclusiva en el Ayuntamiento factura aparte su asistencia a las comisiones y los plenos. En octubre participa en cuatro comisiones -Medio Ambiente, Urbanismo, Cultura y Economía- a razón de 250 euros cada una. Mil euros, por tanto, asegurados al ser comisiones ordinarias. Pero se le suman la comisión extraordinaria y el pleno extraordinario de ayer -500 euros en total- y los 500 euros que ingresará por el pleno ordinario. En total, 2.000 euros extra a su sueldo.
El mes de noviembre también se presenta prometedor para su cuenta personal porque, a las cuatro comisiones y el pleno ordinario de cada mes -1.500 euros- se le unirá otro pleno extraordinario el 3 de noviembre para tratar el tema del Astoria, otros 250 euros para el bolsillo.
Cassá no está haciendo nada ilegal. Al contrario. Cobra lo que le corresponde por asistir a estos actos del Ayuntamiento. Ciudadanos -el partido por el que Cassá se presentó a la alcaldía en 2019 y que abandonó en mayo para pasar a ser concejal no adscrito- presentó una moción al pleno ordinario de julio solicitando la reducción de la retribución a concejales del Ayuntamiento que ya contaran con dedicación exclusiva en otra administración pública. Un torpedo a la línea de flotación de Cassá. La formación naranja pidió que se abonaran, como mucho, 50 euros por sesión y, de paso, que se declarara tránsfuga a Cassá. La moción salió adelante con los únicos votos en contra del PP y, lógicamente, de Cassá pero, por ahora, esa reducción no se ha hecho efectiva.
Aquel 30 de julio fue el único en que el ex líder de la formación naranja se explayó a gusto en el Pleno. “Se ha dicho que robo, que soy un chantajista y lo que gano son 30 euros más al mes. He estado siempre trabajando en todos los plenos y comisiones y ser concejal no adscrito es un derecho institucional”, recalcó, añadiendo que “he apoyado, apoyo y apoyaré al PP a nivel provincial y a Francisco de la Torre como alcalde”. De la Torre también le apoya a él -tampoco le queda otra- aunque eso le suponga enfrentarse a Noelia Losada, portavoz de Ciudadanos y concejala en el equipo de gobierno. Al PP le interesa, por ahora, cuidar a Cassá y el alcalde hasta le ha puesto un despacho alejado del Consistorio. En 2023 habrá elecciones municipales. Lo lógico, desde un punto de vista de supervivencia política, sería que Cassá intente entrar en las listas del PP y habrá que ver si el partido presidido por Elías Bendodo cede o no a sus pretensiones. El tiempo dirá.