Delgado sólo consigue 650 avales frente a los 16.321 que recabó la ahora candidata por Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, en 2015, y su proyecto ganó con un 75 % de votos, cifra que supera a la del congresista por Cádiz a pesar de que éste no ha tenido oposición

En la recogida de avales, los inscritos sólo podían dar su apoyo a una mujer frente a 19 hombres. La formación que aspiraba a superar el modelo patriarcal ni siquiera ha sido capaz de presentar unas precandidaturas paritarias

Sólo se presentó una candidatura, la del guardia civil, junto a una ‘lista blanca’ que sirve para dar una pátina de legitimidad a un procedimiento trufado de la misma falta de democracia interna que caracteriza a los partidos tradicionales, como el PP de derecha extrema

05/05/22.
  Opinión. Sociedad. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. Venían a asaltar los cielos. Podemos Andalucía ha demostrado que aquel movimiento de base, asambleario y participativo se ha pervertido democráticamente y convertido sus primarias para la candidatura al Parlamento Andaluz en un proceso opaco, controlado por el aparato del partido y,...

...en definitiva, en un dedazo al más puro estilo del Partido Popular. El congresista de la formación morada por Cádiz, el guardia civil Juan Antonio Delgado, salió ayer elegido formalmente como número uno de cara a las elecciones del 19 de junio con un 71 por ciento del menguante censo de los inscritos en la región.

A pesar de contar con el apoyo de la dirección estatal e ir acompañado en todo momento por la secretaria general de Podemos, la ministra  Ione Belarra, el porcentaje es inferior al que obtuvo su predecesora y actual candidata por Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, quien se impuso en 2015 con el 75 por ciento de los apoyos de las bases y miles de votos más que el congresista gaditano pese a tener en su contra a la entonces dirección y que, a diferencia del ya postulado como candidato, sí se vio obligada a enfrentarse en el proceso de primarias a otra lista sólida y no ‘blanca’, que se quedó en el 22 por ciento de los votos. La actual candidata de Adelante Andalucía consiguió entonces 16.321 avales frente a los 650 que ha obtenido el guardia civil en un procedimiento en el que sólo ha concurrido una mujer frente a 19 hombres, algo que choca con un partido que aspiraba a superar el modelo patriarcal.


La democracia interna ha sido una tomadura de pelo en toda regla en un breve periodo que, aunque concluyó ayer, ha estado en todo momento tutelado por la secretaria general de Podemos a nivel estatal y regional, que ostentan la ya citada Belarra y Martina Velarde, respectivamente. El desconocimiento en la región de Delgado, quien ejerce de diputado en el Congreso, unido a su falta de discurso y carisma, comprometen incluso la posibilidad de que el próximo 19J el candidato de Podemos Andalucía consiga su acta de parlamentario andaluz en unas elecciones a las que concurrirá previsiblemente como número uno por Cádiz. Así lo confirman todos los sondeos que se han publicado hasta ahora, que sí le dan a Rodríguez un puesto asegurado por la misma localidad.

El malestar por la situación entre Podemos e Izquierda Unida, que conforman la confluencia Unidas Podenos, es también más que patente entre las bases de IU, que no alcanzan a entender por qué Podemos se comporta como la principal fuerza de su coalición y de la que se está fraguando Por Andalucía, cuando no gobiernan ni un solo ayuntamiento en toda la comunidad autónoma, frente a los 81 consistorios donde IU detenta la alcaldía. La formación morada, lejos de conseguir una implantación territorial, se ha desmembrado con la expulsión de Rodríguez y varios diputados durante esta legislatura. Con el candidato socialista, Juan Espadas, fuera del Parlamento andaluz, y la ausencia de Rodríguez, la portavoz parlamentaria de IU Andalucía, Inmaculada Nieto, se ha revelado como la verdadera oposición a San Telmo durante el gobierno de Moreno Bonilla. La militancia del PCE, principal partido de IU, y los simpatizantes de esta formación no comprenden por qué se les permite a “los primos”, como se refieren a Podemos, tantas concesiones, cuando la debilidad y capacidad de movilización de la formación morada en la comunidad autónoma es objetivamente inferior, y el ciclo electoral no tiene nada que ver con el de 2015.


El equipo negociador de Podemos en Por Andalucía cuenta con una amplia representación por parte de la provincia y capital malagueña. El por ahora concejal en el Ayuntamiento de Torremolinos, José Piña; el ex edil en el mismo consistorio, Rafael Herrero, y los concejales municipales en Málaga capital, Paqui Macías y Nico Sguiglia, forman parte de quienes están llevando las negociaciones para la supuesta candidatura conjunta por parte de los de Delgado. Mientras Piña y Herrero pueden aspirar, como mucho, a dar el salto a los sueldos del Parlamento como asesores, Macías va como número tres en la lista ganadora contra nadie, y espera presentarse como número uno por Málaga (puesto de salida que desplazaría al coordinador de IU Andalucía, Toni Valero, a un hipotético segundo puesto en la localidad) y compaginar sus actuales atribuciones y retribuciones con las de parlamentaria andaluza. Sguiglia, al no contar con la nacionalidad española, continuaría previsiblemente con su actual responsabilidad como edil, aunque también podría pelear por un puesto como asesor en Andalucía y se ha mostrado en todo momento afín al guardia civil gaditano.

Con poco más de 40 días para alcanzar un acuerdo para una candidatura de unidad, sólo los de Teresa Rodríguez, quienes concurrirán como Adelante Andalucía en solitario, se han mostrado coherentes con su discurso desde el inicio. No aceptarán imposiciones de Podemos, y dicen que no entrarán en un gobierno socialista y, desde el primer momento, se han desmarcado de la confluencia. Su proyecto pasa por un andalucismo de izquierdas y, como mucho, dicen que votarían una investidura alternativa a la de Moreno Bonilla, pero sin tocar poder.


A pesar de todo esto, Delgado aseguró ayer que va a intentar unir también a Adelante Andalucía a Por Andalucía. Ni Rodríguez ni nadie de su formación se pronunció al respecto, y es más que patente que no se sienten cómodos con esa posible unión, a sabiendas de que a lo máximo que aspira dicho espacio por ahora es a seis diputados regionales, casi la misma cifra que formaciones que la integrarían. Una tarta demasiado pequeña como para repartir entre tantos partidos y egos, muchos de ellos enfrentados, rivales históricos o, directamente, sin nada que ver. Cabe recordar que Rodríguez, cuando concurrió con Podemos en coalición con el entonces candidato de IU Andalucía, Antonio Maíllo, bajo la marca que ahora se ha apropiado, Adelante Andalucía, consiguió 17 diputados regionales, una cifra abismalmente superior a lo que proyectan las encuestas en el caso de que finalmente haya acuerdo de unidad entre las izquierdas.