EL OBSERVADOR mantiene su apadrinamiento de artistas varios. Un malagueño en Budapest. Un gran compositor y multinstrumentista que canta sus canciones mestizas de folk psicodélico, pop barroco, música clásica, rock, country…

23/09/22.
 Opinión. La revista EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com continúa lo que llama un apadrinamiento de artistas varios. Creadores de obras de interés sin importar edad, sexo, tipo o condición. De la música a la literatura pasando por lo visual, la plástica o la imagen...


Hoy, Alejandro Moreta. Un músico malagueño que no se puede despegar de Budapest. Vive y crea allí, aunque al principio lo único que quería era regresar a Málaga y olvidarse de la aventura húngara. Con su formación llamada Music Illness Cash-Machine, finalmente echó raíces budapestinas.

Moreta compone una música mestiza de gran personalidad que no deja de resultar provocadora. Un cóctel de folk psicodélico, pop barroco, música clásica, rock, country… Es un compositor de muchas habilidades que toca varios instrumentos y escribe las letras de sus canciones. Su multicapacidad artística abarca muchas facetas, lo que le lleva a la fotografía y al audiovisual. Para acompañar su música a veces se emplea en fotomontajes y en vídeos, poéticos e inquietantes, como los clasificados de inadecuados por YouTube, que no se pueden dejar de ver. Puede consultarse una lista de ellos AQUÍ.


Inició sus estudios musicales en el Conservatorio Superior de Málaga, donde aprendió trompeta, pero los dos instrumentos que siempre soñó tocar aprendió a hacerlo de forma autodidacta,b el piano y la guitarra. Su primer álbum, Off The Road, lanzado en 2017 AQUÍ y producido con Ambrus Tövisházi, abrió el camino para una segunda obra ya madura, Lock & Down (2020) AQUÍ, donde con sus compañeros de Music Illness Cash-machine, reunió un puñado de las canciones escritas en los últimos años.

Su grabación fue un tanto peculiar. Tuvo lugar en su apartamento de la esquina de Nagymező utca y Andrássy út, en Budapest, en compañía de sus amigos. Su género es diverso. Elementos de música de cine, rock, folk, pop, country y música clásica hacen eco en las canciones. Varios artistas, incluidos el multinstrumentista Henri Gonzo (Fran Palermo), Máté Balla (guitarrista de Ivan & The Parazol), el acordeonista David Yengibarian y el violonchelista y compositor Márkos Albert también participaron en la creación del álbum. A este trabajo más instrumental, producido por el mismo, le siguieron otros tres álbumes: La Orden del Recuerdo (2020) AQUÍ, Senses (2021) AQUÍ y Afternoon Rain (2022) AQUÍ.


La historia

-¿Cómo acaba un joven de Málaga de repente en Budapest?
-Cuando mi padre fue trasladado a la Embajada de España en Budapest por el servicio exterior, lo perdí todo de la noche a la mañana: mi familia (mi madre y mi hermana se quedaron en España), mi lengua materna, mis amigos... todo mi mundo. Tenía 15 años, no sabía nada de Budapest, El Palo era para mí el centro del universo en ese momento.


-Entonces el primer encuentro con Budapest debió ser bastante traumático.
-Estaba desconsolado, pero ahora estoy agradecido de que haya resultado así. Me enamoré de la ciudad, de la arquitectura, del clima... Aquí encontré mi primer amor y aquí vi nevar por primera vez en mi vida. También sufrí mucho choque cultural: recuerdo lo impactado que estaba de que los estudiantes casi no peleaban en la escuela, no había señales de violencia.


-¿La música jugó un papel importante en tu vida incluso entonces?
-¡Y tanto! Una vez, por ejemplo, el profesor de violín de mi hermana nos dejó un sintetizador durante unos días y aproveché para mostrarle a mi padre mis canciones recién compuestas. No mucho después recibí de él el mejor regalo del mundo: un sintetizador propio. Entonces pude escribir canciones para ocho instrumentos y mi pasión por la música siguió creciendo.


https://www.youtube.com/watch?v=lC0u7cRc0Qg&list=PLOKqiLKwMAbmZoq8MktFLR2tqat9vx4Zz

-¿Con qué facilidad llega la inspiración? ¿Cuánto tiempo lleva escribir una canción o armar un álbum? ¿Hay canciones inéditas?
-He estado haciendo música desde que tengo memoria. Cuando llega la inspiración, la música simplemente fluye: una vez, en 2011, un día de marzo, ¡escribí siete canciones de una vez! Con esto quiero decir que componer no se puede planificar, es un proceso impredecible. El futuro de las canciones inéditas suele ser incierto, aunque el objetivo es, por supuesto, que el público las conozca. Por supuesto, no debes estresarte por esto. Si de ahora en adelante solo me enfocara en sacar todas las canciones que he escrito hasta ahora, no tendría tiempo suficiente en lo que me resta de vida. Y luego ni siquiera hemos hablado de las nuevas canciones.


-Pasaste años en Madrid: ¿qué te trajo de vuelta a Budapest?
-Fui a Madrid desde México porque parecía que ofrecería más oportunidades en todos los sentidos. Recomiendo encarecidamente Madrid a todo el mundo, pero solo si quieres hacer turismo y no vivir allí. ¡Es una ciudad alucinante! Echo mucho de menos sus museos, en especial el Reina Sofía, donde puedes encontrar el Guernica de Picasso además de una gran colección de Dalí.


-Entonces, ¿cómo se inclina la balanza hacia Budapest?
-Budapest es un lugar donde puedes encontrar programas y conciertos todos los días, desde heavy metal hasta música clásica. Es un verdadero torbellino cultural, solo se piensa en museos, cines, literatura o arquitectura.


https://www.youtube.com/watch?v=1Oi0lBCJJyc&list=PLOKqiLKwMAbnA6ZxeWc1DpLkbsxnRblz0

-A tu primer album, Off the Road, de 2017, siguió Lock & Down [Confinamiento] (2020). Lo hiciste durante la crisis del Covid. ¿El título es intencional? ¿Hasta qué punto se puede llamar este disco un ‘álbum del coronavirus’?
-El material de Lock & Down nació mucho antes de la pandemia. El disco consta de canciones que he compuesto en los últimos tres años, aunque en realidad comencé a trabajar en el lanzamiento del disco durante la cuarentena. El título es una coincidencia, tanto que al principio me sorprendió la cantidad de personas que lo relacionaron con el coronavirus.


-Pasaron 3 años entre Off the Road y el lanzamiento del nuevo álbum. ¿Qué ocurrió en esos tres años y qué influencias has tenido?
-Off the Road y Lock & Down -como el resto de mis álbumes- también se grabaron en casa, a excepción de los instrumentos de percusión. Como no tengo una banda permanente que aparecería en cada canción, los artistas colaboradores de mis discos se daban la mano unos a otros: esta circunstancia también se siente en las canciones. Cada álbum evoluciona constantemente a medida que vamos influyéndonos en el estilo del otro durante el trabajo.


https://www.youtube.com/watch?v=cenlWCW_O-U&list=PLOKqiLKwMAbmmQgtP04bHIBvih5z4QYEc

-Parece que Lock & Down ha adoptado y repite ciertos elementos de Off the Road, y la balada y la música folk tienen una fuerte influencia en él. ¿Cómo describirías el álbum?
-Esto siempre ha sido difícil: el mayor desafío es describir mi propia música. No hay un solo género específico que pueda usarse para describir mis canciones, desde música clásica hasta bandas sonoras de películas y música country… Todos los géneros que recuerdan a los años sesenta resuenan en ella. Quizás agregaría que Lock & Down es música moderna para jóvenes, que presenta un puñado de canciones de tres años.


-De hecho, todos tus discos contienen canciones que parecen bandas sonoras.
-Sí, la música de cine es uno de los géneros básicos con los que trabajo. Las obras de los compositores Danny Elfman, James Newton Howard, John Williams, Vangelis, Jerry Goldsmith, Randy Edelman, Alan Menken, Ennio Morricone o Thomas Newman me han acompañado a lo largo de mi vida. No en vano han dejado su huella en mi música.


-Ahora estás trabajando de nuevo con Ambrus y Henri. ¿Ha cambiado algo desde que hiciste el primer álbum?
-Tocar música con Henri siempre es un placer, surge de forma natural: él coge la guitarra, yo me siento al lado en el piano y nos adentramos en el mundo de las melodías, donde hay mucha música “esperando ser descubierta”. Ambrus no aparece en Lock & Down, aunque me gustaría mucho volver a trabajar con él, ya que es una persona talentosa de la que solo puedes aprender. Las diferencias en la producción saltan a la vista: más tiempo, más instrumentos, más postproducción... Y como nunca estudié postproducción musical, lo hago de una forma totalmente intuitiva: supone ver varias horas de vídeos sobre frecuencias, compresores y limitadores. Aunque, al final, creo que -al igual que hay que leer mucho para escribir un libro- la clave para componer música también está en escuchar música.


Puede ver y escuchar a Alejandro Moreta AQUÍ en Facebook y AQUÍ en Instagram.