Con una foto de las inmensas torres el concejal socialista tuitea: “Los @PopularesMalaga [PP] en el @malaga [Ayto] están vendiendo #NuestraMálaga a especuladores millonarios”. ¿No sabe que su jefe Dani Pérez ha contribuido a que se construyan esos rascacielos no oponiéndose a ninguno de sus trámites urbanísticos aprobados todos por los socialistas?

La activa cuenta de Twitter @Ecologistas_MLG, responde al edil del PSOE: “Lo que no entendemos es que hayáis apoyado, y aprobado con vuestro voto a favor, todos los trámites urbanísticos para que se construyera el rascacielos de Martiricos y ahora estéis criticando todo el día ese mismo proyecto que habéis apoyado sin dar ningún tipo de explicación”

11/01/23.
 Opinión. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. El secretario de Movilidad Sostenible del PSOE de Málaga y concejal en su Ayuntamiento, Jorge Quero, denuncia y critica implícitamente a su jefe Dani Pérez por partida doble, como secretario general de su partido en la ciudad y como portavoz del mismo en el Consistorio malagueño, en un tuit publicado ayer en su cuenta sobre las 13:00 horas (ver AQUÍ) en...

...el que adjuntando una fotografía de los mamotréticos rascacielos de Martiricos, denuncia que “Los @PopularesMalaga [cuenta del PP] en el @malaga [Ayto de la ciudad] están vendiendo #NuestraMálaga a especuladores millonarios”, a pesar de que Pérez nunca ha votado en contra de este proyecto en toda su larga tramitación urbanística. Es decir, que esos gigantescos edificios que modifican para siempre la relación de Málaga con su entorno, se han construido con el consentimiento explicito del secretario general y portavoz socialista de Málaga, Dani Pérez. Diga ahora lo que diga.


De hecho, la activa cuenta de Twitter, Ecologistas de Málaga, @Ecologistas_MLG, le responde muy claramente al edil del PSOE, Jorge Quero: “Lo que no entendemos es que hayáis apoyado, y aprobado con vuestro voto a favor, todos los trámites urbanísticos para que se construyera el rascacielos de Martiricos y ahora estéis criticando todo el día ese mismo proyecto que habéis apoyado sin dar ningún tipo de explicación” (ver AQUÍ). Pero es que la cosa no necesita mucha… explicación.

Ya en 2014, en el diario Sur (ver AQUÍ), se daba cuenta de que a principios del año siguiente empezaba la transformación radical de la zona por la promotora, es decir, que se inició el procedimiento urbanístico para la construcción de esos inmensos rascacielos sin ningún tipo de oposición por parte del grupo socialista en el Ayuntamiento de Málaga, puesto que de ser así figuraría en el contenido de la noticia y en otras de la época.


Y es que nunca el alcaldable Dani Pérez ha mostrado la menor oposición a que se construyeran esos edificios. Ahora que ha cambiado su discurso político de forma interesada, vendiendo sus planteamientos de otro tipo de ciudad más sostenible, con la intención de diferenciarse del desarrollista alcalde De la Torre y conseguir algunos votos más, es cuando su grupo o simplemente este concejal, Quero, rechazan esa construcción.

Este cambio de actitud política es semejante al que Pérez ha llevado a cabo con la construcción del rascacielos del Puerto. Antes no se oponía (esta revista ha pedido expresamente su opinión sobre este proceder y siempre se ha negado a darlo) a que se construyera, ahora sí porque ve en ello una oportunidad de arañar algún voto al cada vez más posicionado alcalde De la Torre. Ya no quiere rascacielos en el Puerto. Hasta el dibujante de diario Sur, Ángel Idígoras, resumía la postura del socialista en una viñeta antológica.


Y es que las elecciones municipales están volviendo locos a los ya de por sí locos políticos. Todos los días salen a la calle. Citan a la prensa en cualquier esquina de Málaga y allí protestan por algo que ha hecho el equipo de Paco de la Torre si son de la oposición, y si son los que gobiernan los que convocan en otra lugar, enaltecen hasta lo ridículo lo bien que ellos mismos hacen las cosas. Se cambia de opinión, de parecer, de palabras, de actitud, de lo que haga falta… se cambia de todo menos de criterio, porque casi nunca se ha tenido ni se tiene.