Carmen Morillo, miembro de la plataforma ‘No a la Incineradora de Humilladero’: “Estábamos dispuestos a defender con uñas y dientes nuestro territorio, y lo hemos hecho. Es que si no defendemos el territorio, que es lo único que tenemos, para la salud, para la ecología, para la economía, para todo…”
25/09/23. Opinión. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. La única manera que tienen los ciudadanos de parar lo que consideran injusticias es protestando y luchando civilmente contra ellas, tal y como han hecho los vecinos de Humilladero, que se han unido en la plataforma ‘No a la Incineradora en Humilladero’ y han conseguido que toda una multinacional de marcha atrás y renuncie a construir una planta incineradora...
...de residuos tóxicos en su pueblo por el rechazo frontal de los vecinos.
Según explica Carmen Morillo, miembro de la plataforma ‘No a la Incineradora de Humilladero’, fue el alcalde de Humilladero, Miguel Asencio (PSOE), el que “nos avisó en una reunión hace dos semanas, y nos lo han confirmado técnicos del Ayuntamiento, que la empresa ha renunciado a construir la incineradora, que se retiran”.
Morillo admite que “por lo pronto estamos contentos, pero con reservas hasta que todo se aclare”, y es que “la incineradora se iba a instalar a 1.000 metros de la población, de Humilladero, pero es que además a 1.500 metros está la reserva de flamencos más importante de Europa. Entonces nos parecía una barbaridad tan enorme y tan gorda, que dijimos aquí nos tenemos que juntar todos a luchar contra esto”.
De esta manera, según asegura Morillo, “al principio todo el mundo se volcó, nos pusimos a recoger firmas y se recogieron más de 4.000, en un pueblo pequeño”. Además han estado “casi un año concentrándonos todos los miércoles en la plaza de los Derechos Humanos” para protestar por la instalación de la incineradora.
Hay que recordar que recientes estudios (AQUÍ), como los llevados a cabo por investigadores del Instituto de Salud Carlos III o la investigación de biomonitorización de las emisiones de incineradoras de residuos, desvelan que en las proximidades de las incineradoras de residuos, por un lado aumentan las incidencias de algunos cánceres, y por otro lado se encuentran altos niveles de contaminantes orgánicos persistentes.
Morillo entiende que “las movilizaciones ciudadanas siempre sirven, es lo que más sirve, aunque hay que acompañarlo también de todo el tema legal y jurídico”. En su caso “estábamos dispuestos a defender con uñas y dientes nuestro territorio, y lo hemos hecho. Es que si no defendemos el territorio, que es lo único que tenemos, para la salud, para la ecología, para la economía, para todo… por eso estamos muy contentos porque era una monstruosidad que se pusiera la incineradora”.
Sin embargo Morillo recuerda que los terrenos aún pertenecen a la multinacional sueca ‘Gartena’, “con lo cual no estamos dispuestos a retirarnos de la lucha, porque es como tener la espada de Damocles encima de nuestras cabezas”. Así, “no vamos a ir todos los miércoles, pero si vamos a ir el último miércoles de cada mes para pedir explicaciones, porque queremos saber qué es lo que se va a instalar allí, y si efectivamente la empresa va a cumplir con lo dicho”.
Desde la plataforma indican que la empresa ‘Gartena’, además de comunicar que “su renuncia a continuar con el proyecto se debe al rechazo frontal del pueblo de Humilladero”, ha solicitado que los técnicos municipales “elaboren un informe sobre el uso y el diseño urbanístico que se exige en todas las parcelas del polígono industrial ofreciéndose a vender ellos mismos a otras empresas los terrenos”.
En la plataforma ‘No a la Incineradora en humilladero’ señalan que el calendario de movilizaciones y actividades que han organizado ha tenido mucho que ver en la renuncia final de la multinacional sueca.
Así, destacan que “hemos contado desde el primer momento con charlas de expertos y con el respaldo y apoyo de Ecologistas en Acción y del conjunto del movimiento ecologista, destacando el papel que ha jugado el geólogo gaditano, Daniel López, como responsable de temas energéticos en Ecologistas en Acción”.
Han organizado la “reunión de las plataformas andaluzas contra la incineración (PACIRAL) para reivindicar el aire limpio y el no a la incineración en general que se celebró aquí en Humilladero”.
Consiguieron que el Defensor del Pueblo recibiese a la plataforma, “abrió una queja formal y exigió al Ayuntamiento de Humilladero la documentación que justificara las actuaciones que estaba llevando a cabo con respecto a las peticiones de la Plataforma. El papel de esta institución ha sido fundamental, por lo que agradecemos profundamente sus actuaciones”.
Han mantenido reuniones “con todos los grupos parlamentarios del Parlamento Andaluz. En el ámbito local, se han aprobado por unanimidad en los Ayuntamientos de Fuente Piedra, Mollina, Alameda y Humilladero mociones de rechazo elaboradas e impulsadas por la plataforma”.
También se organizó la fiesta de la sonrisa, “con el objetivo de recaudar fondos para sufragar el asesoramiento jurídico que necesitaba la plataforma. Tuvo lugar en la Plaza de los Derechos Humanos con una gran participación de vecinos y vecinas y contó con el apoyo de comercios y Ayuntamientos de los pueblos cercanos”.
La plataforma ha reunido “más de 4.000 firmas de rechazo ciudadano al proyecto de la instalación de la incineradora, realizamos una concentración de 700 personas en la Plaza de Derechos Humanos y, a día de hoy, decenas de viviendas en Humilladero mantienen en las fachadas de sus viviendas pancartas con el No a la incineradora”.
Desde la plataforma apuntan incluso algunas “lecciones” que han aprendido con este movimiento ciudadano, como que “el pueblo unido jamás será vencido, es decir, cuando está unido de verdad y las causas son justas, como lo es en este caso, donde se trata de impedir que se envenene nuestro presente y nuestro futuro, y si además hay movilizaciones permanentes, ahí radica nuestra victoria”. Además entienden que ha sido “importantísimo recuperar la unidad política de todos los grupos del Ayuntamiento de Humilladero en torno al No a la incineradora”.