Ernesto Fernández Sanmartín, biólogo: “Qué más puedo decir en contra, eso es una merdellonada”; “El negocio le reporta muy poco dinero al Ayuntamiento, pero parece que si que le reporta bastante dinero a la empresa que organiza las luces, pero aquí hay que privatizar, que es lo importante”
10/11/23. Sociedad. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. A pesar de las reacciones en contra que han generado las luces navideñas en los jardines de la Concepción, entre ellas las de miembros de la Asociación de Amigos del Jardín Botánico Histórico de la Concepción, estas navidades se volverá a decorar el jardín botánico con el evento ‘Angélical: El Reino de...
...los Ángeles de Navidad’, que se desarrollará entre el 1 de diciembre y el 7 de enero (AQUÍ) en la Concepción.
Según los organizadores, "Angélical ha sido cuidadosamente diseñado para deleitar a todas las edades, con una impresionante exhibición de luces, esculturas y decoraciones angelicales con luz y sonido que transportarán a los visitantes a un mundo de ensueño".
Así, los angelitos estarán divididos en ocho reinos: el reino del invierno encantado, el reino de la esperanza renovada, el reino de la mirra curativa, el reino de la paz y la armonía, el reino del oro y la luz, el reino de la generosidad y la solidaridad, el reino de los dulces y las golosinas y el reino de los sueños y los deseos.
Por su parte, el biólogo y miembro de la Asociación de Amigos del Jardín Botánico Histórico de la Concepción, Ernesto Fernández Sanmartín, asegura que no sabe “qué más puedo decir en contra, eso es una merdellonada”.
Y es que Sanmartín considera que “el jardín Botánico tendría que cumplir muchas otras funciones, y esa es una función absolutamente superflua, pero como ahí deber haber dinero, que ganan unos y otros, y a la gente parece que les gusta estas tonterías”.
Sanmartín recuerda que estuvo en la reunión con la concejala Gemma del Corral, “cuando decidieron que hacían el espectáculo de luces, estaba un individuo que era el que iba a vigilar, todavía no había otorgado la concesión el Ayuntamiento pero ya le habían dado a él la contrata para que vigilara…”.
Además confirma que “ese biólogo fue el que firmó el informe, cuando nos fuimos de la reunión nos saludó, yo le di la mano y me dijo “encantado de conocerle”, y yo le dije “pues yo no estoy contento de conocerle”. A él le han pagado y qué va a decir, que todo ha quedado perfecto”.
“Yo estoy absolutamente en contra”, reitera el biólogo, “pero no hemos podido, eso les gusta y dicen que de esa manera la gente conoce el Jardín Botánico”. Aunque entiende que “el Jardín Botánico de noche la verdad es que no se entera uno, nada más que de los muñequitos y las luces, pero no ven las plantas. El jardín se ve de día, y el que lo conoce bien de día puede hacer un recorrido por el jardín de noche”.
En este sentido Sanmartín lo compara con el que va por primera vez al Torcal de Antequera. “Si vas a conocer el Torcal, ¿vas a ir por la noche? Irás por el día. El Torcal es bonito con niebla, con lluvia, con nieve, incluso al anochecer, pero hay que conocerlo de primera providencia de día, que es como se entera uno de lo que es aquello”.
De esta manera considera que con el Jardín Botánico “pasa lo mismo, pero como se han puesto de moda las tonterías, y nosotros no somos los que mandamos, manda el Ayuntamiento, que lo tiene como una especie de circo”.
Sanmartín estima que “el negocio le reporta muy poco dinero al Ayuntamiento, pero parece que si que le reporta bastante dinero a la empresa que organiza las luces, pero aquí hay que privatizar, que es lo importante”.
Una de las excusas que utilizó el Ayuntamiento para la implantación de las luces en el Botánico es que en otras ciudades, como en Madrid, también se hace. Pues este año han cambiado de sitio el espectáculo de luces que se celebraba en el Jardín Botánico de Madrid, que pasará a celebrarse en el Parque Tierno Galván.
A este respecto, Sanmartín cree que “en Madrid lo han quitado y no tenía que ser una cosa tan gorda como aquí, porque el jardín de Madrid está en el centro, está al lado del Museo del Prado, de la estación de Atocha, no es lo mismo que en Málaga que el jardín está alejado de todo y le afectan más las interferencias externas”.
El biólogo mantiene que “aquí es un problema terrible, pero hay dinero, nada más hay que ver como se pone la calle Larios. Y además como se pelean con el alcalde de Vigo, ahora con el de Badalona también, a ver quién pone la torre más alta, así andamos…”.
Sanmartín con entiende “la ignorancia de esta ciudad de Málaga, a mi me gustaría saber cuanta de la gente que ha venido por la noche a ver las luces, pagando, y sin embargo no conoce el jardín de día”.