Comunicado. Leer íntegro el escrito de la UMA del departamento del vicerrector Francis Paniagua: “… pasan el día como si estuvieran de casa rural, más que como una jornada de protesta (?)…”; “… el presunto líder de los manifestantes, que luce un brazalete rojo (?)…”

14/05/24.
 Opinión. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. La Universidad de Málaga (UMA) ha hecho público un comunicado de prensa, del departamento de Comunicación que lleva a su manera el vicerrector Francis Paniagua, profesor de la Facultad de Comunicación. El escrito, de corte supremacista académico, fachoso y bastante mal escrito,...

...para ser el de una universidad, pone a parir lo más posible a los estudiantes que han ocupado la Biblioteca General de la entidad docente, y habla de la amabilidad extrema y el buen hacer de los representantes de la UMA que han tratado con ellos.


EL OBSERVADOR no pudo publicar ayer la versión de la UMA AQUÍ, porque tras hablar con los estudiantes y llamar a Paniagua para que ofreciera su versión, este señor no se digno contestar, ni durante el fin de semana tuvo tiempo. Esta revista tampoco recibe los comunicados de prensa de la UMA. Debe ser una continuación del reinado del anterior rector Narváez que no contestaba a este medio porque no le gustaba lo que escribíamos de él. Parece que vamos por el mismo camino con el nuevo rector Teo López, el del cambio, sí, aunque posiblemente ahora sea producto de la inconsistencia de los que manejan la comunicación de la UMA que de él mismo.


Lo gracioso es que el vicerrector Paniagua ha estado bastante días sin querer hablar con EL OBSERVADOR, hasta que ha leído esta mañana la información que dábamos, faltándole tiempo para guasearnos y echarnos en cara que lo que publica hoy en este medio es mentira (lo que dicen los alumnos) y que hay que contrastar las noticias, esto dicho por alguien que cuando lo llamas no se pone al teléfono ni hace que nadie de su equipo llame al periodista que le ha consultado. Vamos, que se la pela completamente todo hasta que la revista empieza a titular como no le gusta a él.


No vamos a destripar el comunicado. Lo ofrecemos íntegro y el que quiera leerlo que lo lea y el que no que haga correr la página o el post. Porque estas cosas son así. Pero el tufillo de supremacismo académico que despide la nota es alarmante. O sea, más o menos:  “nosotros, los que mandamos aquí en la UMA, que somos profesores además con títulos, cómo vamos a hacer caso y a permitir que unos mangantes, que vete a saber tú si se lavan, nos digan que es lo que tenemos que hacer, sobre todo porque parece que están de casa rural [que mal escrito está esto, coño] más que como una jornada de protesta [a lo mejor el día que explicaron en clase como hay que comportarse en una jornada de protesta a gusto del maestro no fueron], y, sobre todo, como vamos a permitir que un comunista bolivariano que lleva un pedazo de brazalete rojo nos hable!!!...”.


Da lástima que una Universidad no sepa respirar libertad con los suyos. Incluyendo en estos suyos a los estudiantes, claro. Pero mucha más pena da pensar qué les pueden enseñar en esas clases cerradas a cal y canto de la Facultad de Comunicación a los que se sientan en sus pupitres. Pobrecillos. Y pobres todos.