Carlos Carrera, presidente de la AAVV Centro Antiguo: “Este Ayuntamiento tenía la competencia sobre los usos urbanísticos, la norma ya reflejada y regulando este fenómeno en su PGOU y la obligación de aplicar la norma. Y durante todo este tiempo no se ha querido aplicar”
12/06/24. Redacción. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. El Ayuntamiento de Málaga, por medio de la Gerencia de Urbanismo, aprobó el pasado viernes una instrucción para limitar las viviendas de uso turístico (VUT), según la cual solo se permitirá este uso si el alojamiento tiene una entrada independiente del resto de viviendas residenciales, o bien si el edificio entero...
...está destinado a uso turístico. Para la Asociación de Vecinos Centro Antiguo esta medida llega tarde, ya que “se podía haber frenado este desastre cuando se estaba a tiempo de evitarlo, y no se ha hecho”.
El Ayuntamiento de Málaga basa esta decisión en que el Plan General de Ordenación Urbana de 2011 ya define el uso de hospedaje, como “el servicio terciario que se destina a proporcionar alojamiento temporal a las personas, tales como hoteles, moteles, paradores, pensiones, residencias, etc”. En cualquier caso, esta medida no es retroactiva y solo afecta a aquellas viviendas turísticas que se hayan registrado desde febrero de este año en adelante, y no a los más de 12.100 inmuebles que hay inscritos en el registro de la Junta de Andalucía.
Carlos Carrera, presidente de la Asociación de Vecinos Centro Antiguo de Málaga, considera “muy llamativo” que “ahora se invoque al plan general de 2011 como una herramienta de aplicación a la vivienda de uso turístico”, ya que “nosotros llevamos diciendo esto desde hace años, no solamente nosotros, sino otros colectivos y otros organismos como el Observatorio de Medio Ambiente Urbano (OMAU)”.
Y es que, tal y como explica Carrera, “el PGOU de 2011 establece lo que son los usos de vivienda, los usos residenciales y los no residenciales. Y uno de ellos es el uso de hospedaje, que es un uso no residencial, es un servicio terciario en el que se presta un servicio de alojamiento temporal de personas a cambio de una contraprestación económica”.
Así, “este tipo de servicios de hospedaje se pueden desarrollar en edificios de viviendas, siempre y cuando se cumplan unas condiciones, según el PGOU. Una, que se tenga un acceso totalmente independiente y separado del acceso del resto de vecinos al edificio. Y dos, que tenga una serie de instalaciones, luz, agua, gas, telefonía, etcétera, también independientes de las del resto de vecinos”.Carlos Carrera
Carrera sostiene que “las viviendas de uso turístico se corresponden totalmente con este uso de hospedaje, porque no son una variante de un alquiler convencional, aquí se está prestando un servicio de alojamiento temporal de personas, es más parecido a un servicio de hotel, de pensión, de motel, o como se quiera llamar, que a un uso de vivienda”.
Sin embargo, como apunta Carrera, “parece que aquí se ha querido considerar esto, primero que era economía colaborativa, luego que es una variante la actividad convencional, luego que no era actividad económica,…”.
Estaba regulado
En Málaga las cosas podían haber sido distintas, ya que “a lo mejor otras ciudades no tenían esto regulado, pero Málaga sí lo tenía. De hecho Sevilla ahora está copiando el tema del uso de hospedaje para aplicarlo en su ciudad. Además, las competencias sobre materias y usos urbanísticos son municipales, son de los ayuntamientos. Y luego está la obligación legal de aplicar las normas, que la tienen los ayuntamientos”.
De esta manera, “este Ayuntamiento tenía la competencia sobre los usos urbanísticos, la norma ya reflejada y regulando este fenómeno en su PGOU y la obligación de aplicar la norma. Y durante todo este tiempo no se ha querido aplicar”.
Desde la asociación no comparten “esa justificación que se está esgrimiendo de que es gracias al decreto de la Junta de Andalucía de Turismo reciente, que ya ahora sí se puede aplicar. Pues mire, no, de ninguna de las maneras, la Junta no ha transferido ni una sola competencia nueva a los municipios. La competencia sobre usos urbanísticos ya la tenían los ayuntamientos. Y sobre la regulación, el Ayuntamiento ya la tenía”.
Por eso les parece “de una extrema gravedad” que “durante todo este tiempo, habiéndose podido aplicar a las viviendas turísticas el PGOU, como ahora se está demostrando, pues no se haya hecho, porque se podía haber frenado este desastre cuando se estaba a tiempo de evitarlo, y no se ha hecho”.
Ahora Carrera se pregunta, “¿cómo se revierte el estropicio? Porque esto ha cogido una envergadura que reconducir la situación ya empieza a ser muy complicado”. Ya que, “ahora, aparte de frenarlo, habría que trabajar muy bien cómo revertir lo que ya existe, porque si esto ha estado fuera de la legalidad urbanística, fuera de la norma urbanística, aquí no cabe invocar un principio de irretroactividad a la ley, eso es cuando se promulga una ley nueva, pero es que aquí la ley ya estaba, es decir, que todo esto estaba fuera de norma, esa es la interpretación y la consideración que nosotros hacemos”.
Pedro Marín Cots
El antiguo director del municipal Observatorio Medio Ambiente Urbano, Pedro Marín Cots, dependiente del ayuntamiento de Málaga, ha dado una entrevista a Málaga Hoy (AQUÍ), en la que da su visión de las viviendas turísticas. Así, recuerda que “hay ciudades españolas en las que se han regulado y han obtenido, pese a la problemática que no es fácil, han tenido un cierto control. Otras que lo han hecho más tarde y otras que no han hecho nada, como Málaga, con la consecución de que somos la ciudad con la presión turística más alta de España”.
Marín Cots recuerda que Málaga fue “la primera ciudad que en 2017 georreferenció los usos turísticos. Y ofrecimos una posibilidad de regulación en las zonas que superaban el 10% de los usos, que serían las zonas saturadas”.
Y es que “Málaga tiene un PGOU que se puede utilizar y no se ha utilizado, prohíbe un uso terciario, como es el turístico, con un uso residencial. A parte de eso, se puede regular la presión turística. Es diferenciar entre las zonas que están saturadas, por encima del 10% y las zonas entre el 5 y el 7% que pueden tener un margen y por debajo del 5% que pueden tener. Imagine que no hubiese pisos turísticos, se hubiera compensado con hoteles o apartamentos turísticos la demanda”.
Con Málaga
Por su parte, la portavoz del grupo municipal Con Málaga, Toni Morillas, considera que esta instrucción del Ayuntamiento para limitar las viviendas turísticas “es claramente insuficiente y llega tarde, cuando las viviendas turísticas se han extendido y generado gran distorsión en el municipio, es necesaria mayor valentía y contundencia, dar el paso a una moratoria total en la concesión de nuevas autorizaciones hasta que se regule y planifique de forma adecuada este mercado”.
Morillas indica que “hemos solicitado está medida y otras más efectivas en numerosas ocasiones sin que el equipo de gobierno del PP las haya tenido en cuenta. Ahora ante el agravamiento de la emergencia en materia de vivienda el alcalde se saca esta limitación de la manga, pero su eficacia será limitada. No tiene carácter retroactivo y se quedan fuera, por ejemplo, los locales comerciales reconvertidos en alojamientos turísticos, que tienen todos ellos entrada independiente, y están en claro auge en distintos barrios de la ciudad. Es un fenómeno que ha saltado como una plaga desde el Centro a, cada vez más, distritos de Málaga”.
Por esto, Morillas considera que la medida tendrá “una eficacia limitada al llegar tan tarde, cuando ya ha se han distorsionado los precios de la vivienda, la configuración de grandes áreas urbanas -como el Centro, que se ha despoblado-, o se han generado graves problemas de convivencia. Es una medida cosmética ante la evidencia del caos de las viviendas turísticas y las consecuencias que está provocando en la ciudad”.