El informe ambiental de la Junta es vergonzoso: “Dice que procede edificar ahí porque si no va a estar abandonado, y es peor para los árboles, que no haya nadie que los cuide. Además, dice que si no se edifica la gente va a tirar ahí restos de obra. Esos son los argumentos de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía”
Sólo para ricos. Algunos de los chalets construidos por la promotora Cogitari Homes en una ladera llena de pinos carrasco, costarían hasta 5 millones. Es un despropósito urbanístico: “La construcción en pendientes elevadas y barrios densificados colapsa las infraestructuras (agua, tráfico, saneamiento). Ni El Palo ni Málaga pueden seguir creciendo hacia los montes”
03/09/24. Redacción. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. Hasta 17 asociaciones vecinales y ambientales han alzado la voz en contra de la construcción de 285 chalets de lujo en la ladera oeste del Monte San Antón, un proyecto que consideran "un atentado ambiental y paisajístico" y que el Ayuntamiento de Málaga quiere consentir. Alegan que la urbanización...
...afectaría gravemente a un ecosistema valioso, hogar de especies protegidas, y generaría una sobrecarga insostenible en el tráfico de la zona. Por eso piden la paralización del proyecto y proponen la inclusión del Monte San Antón en el Parque Natural Montes de Málaga como alternativa para preservar este espacio natural.
Las asociaciones manifiestan que están en contra de la “edificación de una nueva urbanización en Pinares de San Antón, con 285 chalets de lujo y zonas para uso hotelero, deportivo, escolar y comercial”. Algunos de estos chalets, concretamente los construidos por la promotora Cogitari Homes en una ladera poblada por pinos carrascos, costarían hasta 5 millones de euros (AQUÍ).
Las asociaciones recuerdan que “el Plan General de Ordenación Urbana de Málaga vigente dice: Este Cerro está compuesto por manchas arboladas de pinos, algarrobos, encinas, olivos, almendros, zonas de matorral y rocosas producidas por desprendimientos y corrimientos naturales. Dentro de este variado paisaje se refugian numerosas especies de gran interés (…) Monte S. Antón se incluyen como áreas a proteger debido a sus características botánicas, faunísticas y paisajísticas. Su inclusión, como parte de una red, va a permitir itinerarios entre la ciudad y los enclaves naturales del exterior”.
Sin embargo, para las asociaciones resulta asombroso que en el Informe Ambiental Estratégico emitido por la Junta de Andalucía el 16/02/2024 pueda leerse que “Se considera que la “Modificación del Plan Parcial de Ordenación del Sector SUP-LE.8 "Lagarillo" del PGOU de Málaga”, en el T.M. de Málaga no tendrá efectos significativos sobre el medio ambiente…… Se evita la degradación por el abandono y se consensua la conservación con el desarrollo previsto de forma similar al residencial contiguo Pinares de San Antón…”.
Estas asociaciones consideran que el desarrollo urbanístico de la ladera oeste de Monte San Antón supondría “un atentado ambiental, por la agresión que afecta a numerosas especies vegetales y animales que pueblan la zona, especialmente valorada por tratarse de reserva del camaleón y otros reptiles y anidamiento de aves en peligro de extinción; observatorio privilegiado de aves migrantes desde y hacia África; Y produciría una seria alteración del curso de los arroyos San Antón, Lagarillo y Jaboneros”. Ver estudio ‘Flora y Vegetación de un espacio periurbano singular: El Monte San Antón’ (AQUÍ).
https://youtu.be/_R-cdyy-dDQ
También entienden que sería “una aberración paisajística, por la contaminación visual desde y hacia Málaga, afectando a centenas de miles de personas, entre residentes y visitantes” y una “agresión cultural a la historia con sus restos arqueológicos y a un símbolo identitario de El Palo en especial (romería de San Antón) y de la ciudad en general (las tetas de Málaga)”.
Para estas asociaciones se trata de un “despropósito urbanístico”, ya que “la construcción en pendientes elevadas y en barrios ya densificados, colapsa las infraestructuras (agua, saneamiento, tráfico). Ni el Palo ni Málaga pueden seguir creciendo hacia los montes”. Además creen que es un “disparate constructivo”, señalando que “la geología delicada de la zona aumenta los riesgos de corrimientos por la alteración de las vetas calizas y los abancalamientos necesarios para edificar”.
Por todo esto, las asociaciones califican este proyecto como “una operación especulativa que trasvasa rentas del patrimonio ambiental común a manos privadas”.
Frente a la edificación de estos 285 chalets de lujo, las asociaciones solicitan que el Ayuntamiento “paralice el desarrollo urbanístico de la ladera Oeste del Monte de San Antón” y de “cumplimiento urgente a las determinaciones del Plan General en cuanto a su compromiso de elaboración de un Plan Especial de conservación del Monte San Antón”.
Con este objetivo proponen la “constitución de una plataforma ciudadana en defensa de nuestro Monte que acuerde con el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía la incorporación del Monte de San Antón al Parque Natural Montes de Málaga”. Ya en el año 2007 los biólogos, Óscar Gavira y Federico Casimiro-Soriguer, publicaron una memoria para la declaración del Monte de San Antón como Monumento Natural (AQUÍ).
Además piden “a las personas que aspiren a urbanizar o vivir en Lagarillo que reflexionen y renuncien a contribuir a la degradación de nuestro común patrimonio natural”.
Asociación de Vecinos de El Palo
Un vecino de El Palo, que ejerce de asesor de la Asociación de Vecinos en este tema, explica a EL OBSERVADOR que “esto es una promoción que lleva mucho tiempo de conflicto, pueden ser veinte o treinta años. Incluso en el Plan General antiguo ya se planteaba la posibilidad de edificar”.
Pero las obras se han ido retrasando porque “han estado de pleitos durante mucho tiempo, la comunidad de propietarios ha estado alegando y han tardado mucho las sentencias en pronunciarse”.
El proyecto actual consta de 285 chalets de lujo con posibilidad de tres aparcamientos cada uno, más zona hotelera, comercial, escolar y deportiva, lo que según este asesor “va a generar una tensión de tráfico en movimiento, tanto para la propia urbanización de Pinares de San Antón, que no va a sostener todo el tráfico que puede generarse como efectivamente, pues para el medio ambiente, porque allí hay un montón de especies”.
Según asegura, “el Ayuntamiento siempre ha querido edificar”, y “al ser el propietario de una parte, creo que es propietario de las cesiones que tiene que hacer la constructora, solicitó un informe ambiental por parte de la Junta de Andalucía, que emitió un informe (AQUÍ) en febrero en el que se dicen barbaridades, desde nuestro punto de vista”.
Así, este asesor resalta que en el informe, “entre otras cosas, dice que procede edificar ahí porque si no se edifica va a estar abandonado, y es peor para los árboles, que no haya nadie que los cuide. Además dice que si no se edifica la gente va a tirar ahí restos de obra. Esos son los argumentos de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía”.
Pero este asesor recuerda que el Lagarillo “es una zona privilegiada de observación de aves migrantes, hay camaleones, hay especies de árboles delicados… no es tontería lo que hay allí como para que lo machaquen”.
El Ayuntamiento no contesta a los vecinos
Tal y como publica Alfonso Vázquez en La Opinión de Málaga (AQUÍ), la Gerencia de Urbanismo, que depende del Ayuntamiento de Málaga, lleva 14 años sin responder unas alegaciones sobre Movilidad de la comunidad de propietarios de Pinares de San Antón. Fuentes municipales alegan que “procedimentalmente el expediente no ha llegado a ese punto”.
Las alegaciones se presentaron en 2010 a raíz del proyecto de promoción de 285 chalés de lujo en la zona colindante del Lagarillo, algo que provocaría, según un informe encargado por la comunidad de propietarios, que aumentase el tráfico en Pinares en 1.426 veces.
Según las fuentes municipales, las alegaciones “están contestadas y así constan en el expediente”, pero no han sido remitidas a los vecinos de Pinares por no ser el momento procedimental.
Por su parte desde la comunidad de propietarios de Pinares de San Antón han mostrado su extrañeza por la respuesta municipal, ya que, según el artículo 21 de la Ley de Procedimiento Administrativo, la administración tiene la obligación de resolver en un plazo máximo que no puede exceder los seis meses.