El periodista recibió un correo del subdirector que le instaba a suavizar ciertos términos “faltones”. Teodoro León Gross opina sobre el despido de Troya

29/04/14. Opinión. Diario Sur ha censurado al periodista Curro Troya, muy conocido en Twitter, por una columna en la que cargaba contra el presidente de la Diputación Elías Bendodo. Troya comparte la columna en esta revista y adelanta a  EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com que no es la primera vez que suceden hechos así en la redacción del periódico más vendido de Málaga, y manifiesta su disposición a explicar cómo han sido sus meses como colaborador del diario de Vocento.

EL periódico ha justificado la expulsión de Troya de su plantel de colaboradores manifestando que la del periodista se trataba de una crítica “interesada”, “reiterada y centrada en los mismos”, algo que el profesional niega a la mayor. Esta revista ha contactado con diferentes personas del entorno de Troya y del periodismo malagueño para que aporten su opinión al asunto.

HAY división en el sector, y se hacía patente sobre todo en las redes sociales en las que Troya se desenvuelve, como Twitter. La censura que el periodista denunció ayer a primera hora de la mañana se convirtió rápidamente en el chascarrillo local, y fue tema de conversación en numerosas oficinas de diversas cabeceras escritas y audiovisuales de la provincia. Curro Troya publicaba la columna que no saldría publicada en Sur en la que informaba sobre la actitud de Elías Bendodo, presidente de la Diputación de Málaga y del PP local, quien el pasado Jueves Santo se “coló” en una fotografía que los escoltas le habían pedido al exmandatario británico Tony Blair. Blair cuando estaba visitando la ciudad de Málaga en compañía de Bernardino León, diplomático representante de la Unión Europea, y del actor Antonio Banderas. Blair nunca supo que con quién se hacía la foto era con un político local, y del suceso se hizo eco el diario El Mundo y esta misma revista.

LA columna de Troya aportaba nuevos datos, como que Blair y León habían estado comiendo en El Higuerón. En el texto, Troya manifiesta que Bendodo hizo “de mocito feliz” para colocarse en la foto.

SEGÚN Troya, a las once y media de la noche del domingo recibió un correo electrónico remitido por Javier Recio, subdirector del diario Sur. El correo electrónico consideraba la columna de Troya “faltona”. “Comentar eso por correo electrónico y no mediante una llamada telefónica no son maneras. Y que un cronista político señale el ridículo no quiere decir que falte, sino que desvela y desnuda la realidad frente al lector. Somos contra poder, no mamadores del poder”, justifica Troya. Según el periodista, entre él y Recio se cruzaron apenas dos correos. La mañana de ayer lunes la columna no había sido publicada y Troya decidió compartirla con sus seguidores a través de su blog, Un pobrecito hablador. El blog en Sur, Arde Troya, fue borrado a media mañana.

NO es la primera vez que las colaboraciones de este diario se envuelven de polémica. El profesor José Damián Ruiz Sinoga abandonó su colaboración con el periódico cuando se enteró de que el mismo había contratado a la periodista Isabel Naranjo, esposa del propio Bendodo. Muchos de los internautas lamentaron ayer en las redes la “deriva ideológica” de la cabecera de Vocento, precisamente días después de que el también columnista Teodoro León Gross elogiase en las redes a su director por mantener a las firmas incómodas para el diario.

EL periodista Curro Troya quiso recordar que su labor es ser “contra poder”, “no mamadores del poder”. Esta revista contacto con otros colaboradores del diario Sur, como Julián Molina, profesor universitario conocido en Twitter como Capitán Ahab, o Teodoro León Gross, columnista e editorialista de la cabecera de Vocento. El primero manifestó no tener “nada que decir”. “Creo que ambos protagonistas lo han dejado bastante claro”. León Gross, por su parte, manifestó que el despido de una firma y la no publicación de un artículo siempre genera “frustración”, al tiempo que consideró que nunca había tenido ningún problema con el diario ni con el director y que las consideraciones de Manolo Castillo en Twitter le invitaban a pensar que el conflicto “no se limita a un artículo en concreto”. “En ese sentido el director tiene la potestad de publicar o no publicar y habrá que conocer la posición del periódico”. Manolo Castillo manifestó en Twitter que “un director debe defender la opinión libre y plural, pero también que no se utilice el diario para campañas de descrédito o insultos interesados”. A continuación ofrecemos la columna vetada a Troya.

El otro ‘mocito feliz’

UNA de las anécdotas que remataron la Semana Santa pasada fue sin duda la visita que el ex premier británico Tony Blair hizo a nuestra ciudad, acompañado por el diplomático malagueño Bernardino León –por más que otros quieran apuntarse tantos o fotos–.

LOS dos dirigentes europeos y sus respectivas esposas disfrutaron de una cena en El Higuerón,que había servido de punto de encuentro. Desde allí se encaminaron a nuestra ciudad, una vez concertado el servicio de seguridad oportuno y con un guía de excepción –Antonio Banderas– dotado de una doble sabiduría: la cofrade y la de saber explicarse en la lengua de Shakespeare.

LA chilindrina surgió cuando el singular protagonista fue usado cual decorado involuntario de la foto de un político local, el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, que haciendo de ‘mocito feliz’, colaba su ‘imagen de estadista’ en redes sociales, gracias al chivatazo del Área de Seguridad municipal. De ahí al ataque de cuernos del alcalde sólo medió un segundo que se ha prolongado en la prensa con el fuego cruzado de los respectivos gabinetes de prensa de estos dos compañeros de corporación y de partido, y sin embargo ‘amigos’. Seguramente que si León Grossse enterara de todo esto, se quedaría perplejo, desde su lejanía, con la trifulca ‘popular’.

HAY que reconocer, por otra parte, que el gesto del que también es presidente del PP de Málaga en la foto es para descubrirse.  Su cara muestra una sutil sonrisa a modo de encuentro formal. Sin embargo, la de Blair, curtido en mil batallas y alguna guerra, con las manos en los bolsillos –seguramente por la ‘mala prensa’ que nos dan a los andaluces– no muestra especial afecto sino más bien cara de ignorancia –‘¿quién será este tipo que se me pega?’ parece preguntarse–.

DIRÍA Machado que este Bendodo no es un  hombre de ayer ni es de mañana, sino de nunca. Es verdad que no es fruto maduro, ni aún sabemos si podrido, pero muchos ya estamos seguros que sólo es una fruta vana. De esa España que no ha sido y sin embargo no acaba de pasar… Créanme: resulta difícil ilustrar el vacío del mundo en la oquedad de las cabezas de estos ‘mocitos felices’ que nos gobiernan. Como si aún estuviéramos en aquellos casinos provincianos. Como si siguiéramos viviendo aquel pasado efímero que no termina nunca de irse.

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