“El acelerado avance de la tecnología y su implicación en nuestra forma de vivir va generando, sin cesar, nuevas cuestiones en todos los ámbitos”
OPINIÓN. Charlas con nadie
Por Manuel Camas. Abogado30/03/21. Opinión. El conocido abogado Manuel Camas escribe en su colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre el acelerado avance de la tecnología y los cambios que va a conllevar: “Los enormes y rápidos cambios que vamos a ir viviendo se me antojan más evidentes que nunca en la Historia de la Humanidad. Generan cuestiones que van más allá de la economía o...
...la tecnología, pondrán a prueba la condición humana, la ética, nos traerán de vuelta las grandes preguntas de la filosofía que nunca llegamos a contestar”.
Ciencia ficción
Un entrañable amigo, fallecido ya hace casi veinte años, me decía cuando lo visité por última vez, consciente ambos ya de lo irreversible de su enfermedad, “lo que más me fastidia es todos los cambios que me voy a perder”..
El acelerado avance de la tecnología y su implicación en nuestra forma de vivir va generando, sin cesar, nuevas cuestiones en todos los ámbitos.
La aplicación de la tecnología se realiza en los actos más cotidianos de la vida: el trabajo, la comunicación, el transporte, las relaciones, el hogar, la cultura, etc.
La aceleración de los avances es exponencial, un ejemplo de función de crecimiento exponencial sería la que representase el crecimiento del número de células de un embrión mientras se desarrolla en el útero materno.
Según la Consultora Everis refiriéndose a los avances tecnológicos, “Los humanos estamos acostumbrados a predecir linealmente. Por su parte, estas tecnologías siguen una pauta de evolución exponencial (siguen la Ley de Moore, término informático originado en la década de 1960 que establece que la velocidad del procesador o el poder de procesamiento total de las computadoras se duplica cada doce meses. La norma la acuñó Gordon Moore, cofundador de la conocida empresa Intel, y sigue funcionando en la actualidad). Las tecnologías exponenciales serán, en algunos casos ya lo son de hecho, la semilla de una transformación disruptiva”.
Los cambios se suceden cada vez a mayor velocidad y los avances significativos se producen más cerca en el tiempo.
En 1958, los matemáticos Stanisław Ulam y John von Neumann referían una conversación entre ellos que “se centraba en el cada vez más rápido avance de la tecnología y en los cambios en la forma de vida humana, que sugiere la aproximación de una singularidad esencial en la historia de la raza humana más allá de la cual la vida humana, tal como la conocemos, no tiene continuidad”.
En su libro "Mindsteps to the Cosmos", Gerald S. Hawkins alumbra su noción de mindsteps (pasos mentales): cambios radicales e irreversibles de los paradigmas o visiones del mundo. Según se recoge en Wikipedia, Hawkins identificó cinco mindsteps distintos en la historia de la humanidad y la tecnología que venían acompañados de estas nuevas visiones del mundo: la invención de las imágenes, la escritura, las matemáticas, la imprenta, el telescopio, el cohete, el ordenador, la radio, la televisión... Cada una de ellas lleva la mente colectiva más cerca de la realidad, una etapa más allá en su compresión de la relación entre los seres humanos y el cosmos". Hawkins advirtió: "El periodo de espera entre mindsteps se está haciendo más corto”. La "ecuación de mindstep" de Hawkins cuantificaba esto y daba fechas para futuros mindsteps. La fecha del próximo mindstep (el quinto de una serie que comienza en 0) se daría en 2021, con dos mindsteps más sucesivamente más cercanos, hasta el límite de la serie, en 2053.
Mario Arroyo Martínez (Universidad de la Rioja) sobre el autor de moda, Yuval Noah Harari, nos dice que ofrece “una apretada y panorámica visión de la historia humana desde el despuntar del homo sapiens hasta la actualidad, con algunas a la par sugerentes e inquietantes reflexiones sobre el futuro y supuestamente probable fin de la especie humana”.
El fin de la especie humana que predice Harari lo es por superación, no por extinción, sostiene que los cambios que nosotros mismos propiciamos generará, está ya generando, una especie de seres distintos (genética, robótica aplicada al propio cuerpo humano, etc.).
Los enormes y rápidos cambios que vamos a ir viviendo se me antojan más evidentes que nunca en la Historia de la Humanidad. Generan cuestiones que van más allá de la economía o la tecnología, pondrán a prueba la condición humana, la ética, nos traerán de vuelta las grandes preguntas de la filosofía que nunca llegamos a contestar.
Si alguien desea catalizadores para pensar en ello, recomiendo el libro titulado Exhalación, de Ted Chiang (Editorial Sexto Piso), juega con la ciencia ficción para hacernos preguntas, a base de relatos cortos y amenos, cuentos de ciencia ficción. Nos plantea problemas, de manera a veces muy directa, poco sutil, nos hace ver lo confusa que puede llegar a ser la realidad y nuestras actuales líneas gruesas de pensamiento.
Plantea qué ocurre si la ciencia nos demuestra que no existe el libre albedrío (un simple mando de apertura de la puerta se activa antes de que lo pensemos tan siquiera, pero si deseamos jugar a engañarlo no funciona, porque verdaderamente sabe si abriremos o no, porque adelanta el futuro unos segundos); qué ocurriría si fuese posible viajar en el tiempo a vernos y conversar con nosotros mismos; los problemas de la educación y la ética de la responsabilidad sobre otros seres de creación virtual, pero que sienten piensan, desean; ver episodios de nuestra propia vida sin matices afectivos, sin distorsiones interpretativas.
Muy apropiado para un mundo de pandemia, el proverbio o maldición china, “ojalá te toque vivir tiempos interesantes”. Nos cuesta a veces aprender lo evidente y es evidente que después de la pandemia estaremos en un mundo diferente, aunque quizás no lo parezca y nos cueste darnos cuenta de lo distinto que es.
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