“La inflación no solamente perjudica a quienes perciben ingresos fijos y a los que ahorran, también genera especulación y ocasiona errores empresariales

OPINIÓN. Charlas con Nadie

Por Manuel Camas
. Abogado

21/03/23.
Opinión. El conocido abogado Manuel Camas escribe su colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre la crisis bancaria y la inflación: “Qué nos ha pasado en estos años, con la crisis del 2008, los problemas con las primas de riesgo, después la pandemia, la cantidad de dinero puesto en circulación por las autoridades monetarias para paliar esos problemas ha sido ingente...

...y eso más tarde o temprano debía disparar la inflación, como ha ocurrido”.

Lecciones

La semana está inevitablemente unida a la crisis bancaria en los Estados Unidos y en Suiza.


Me vuelvo a los orígenes y busco entre mis libros el viejo Manuel de Economía que estudié en segundo de la licenciatura de Derecho, el Wonnacott lo llamábamos, aunque el título de la obra es Economía.

La obra dedica un apartado al pánico bancario: <Y como los bancos no tenían reservas suficientes para satisfacer todos sus pasivos, cada depositante tenía un aliciente para retirar de su depósito antes de que el banco sufriera una carencia total y fuese forzado a cerrar. Para todos los depositantes como grupo, esta era una conducta autodestructiva: el pánico podría arrojar a los bancos a la bancarrota, ocasionando a algunos de los depositantes la pérdida definitiva de su dinero. De todos modos, no podía esperarse que los depositantes se mantuvieran fuera de la fila de los que hacían retiros y que se suicidaran en aras del bien común.>

Esta explicado con sencillez, pero no es más que lo que ha ocurrido al Silicon Valley Bank. Aunque para evitar el pánico bancario se crearon los fondos de garantía de depósito, de 100.000 € en España, de 250.000 $ en los Estados Unidos, porque de esa manera quedan protegidos la mayoría de los clientes, desde luego los vulnerables, no ha sido suficiente.

Ni la supervisión, debilitada por Donald Trump, ni la garantía de depósitos han bastado y el contagio ha comenzado, otros bancos medianos americanos, Credit Suisse en Europa, aunque parece que la situación se controla.

En el fondo de la crisis bancaria americana parece estar la inflación, el desequilibrio que ha generado en las propias inversiones del banco quebrado, pese a haberlas hecho en bonos seguros que no obstante perdieron valor en su venta anticipada debido al marco inflacionario.

Siguiendo el viejo manual, la inflación no solamente perjudica a quienes perciben ingresos fijos y a los que ahorran, también genera especulación y ocasiona errores empresariales, como pudiera ser el caso.


Sigo con Nadie leyendo mi libro de economía que advierte que una de las responsabilidades de las autoridades monetarias es asegurar que exista una cantidad adecuada de dinero en el sistema, ni demasiado ni muy poco.

Para explicarlo pone el ejemplo de un campo de prisioneros, donde el sistema monetario se basa en los cigarrillos que actuaban como dinero, cuando la Cruz Roja podía enviar abundantes cantidades de cigarrillos el precio de las cosas aumentaba exponencialmente, por el jabón era necesario dar muchos más cigarrillos que cuando el tabaco era escaso. Frente a la  inflación provocada por el exceso de moneda, cigarrillos, la escasez de tabaco generaba deflación, por pocos cigarrillos se obtenían bienes cuando no había tabaco en el campo de prisioneros.

Qué nos ha pasado en estos años, con la crisis del 2008, los problemas con las primas de riesgo, después la pandemia, la cantidad de dinero puesto en circulación por las autoridades monetarias para paliar esos problemas ha sido ingente y eso más tarde o temprano debía disparar la inflación, como ha ocurrido. Ahora habrá que retirar parte del dinero o disminuir su velocidad de circulación. Subir los tipos de interés es una manera de hacerlo. Sin embargo  la crisis bancaria obliga a moderar la subida de tipos, muy probablemente sea contraproducente para la inflación, al final todo se paga de una u otra forma.

Continúo hojeando mi viejo libro de economía y llega los capítulos dedicados al empleo. Las empresas están interesadas en emplear cuando ven que así aumentan sus ingresos.

La economía desde que apareció la moneda, ha permitido cambiar por dinero bienes y servicios, el trabajo es la principal fuente de ingresos, de la que vive la mayor parte de la humanidad.

Nos adentramos en una tecnología que en el corto y medio plazo va a destruir empleo sin tregua, las máquinas guiadas por sistemas de inteligencia artificial, alimentadas por los ingentes datos del internet de las cosas, a velocidad cuántica, podrán hacer casi todo.

Quien tenga dudas que pregunte a ChatGpt.

Si el trabajo disminuye de valor, qué va a ocurrir en nuestras sociedades. Se nos dirá que estas cuitas ya se plantearon en cada una de las revoluciones industriales, que luego surgían nuevos trabajos que realizar y que ahora ni siquiera imaginamos, pero alguien me puede decir qué no será capaz de hacer una máquina en un medio plazo.

La economía, en una de las acepciones del diccionario es la ciencia que estudia los métodos más eficaces para satisfacer las necesidades humanas materiales, mediante el empleo de bienes escasos.

Parece imprescindible que comencemos a imaginar un mundo en el que el trabajo no sea necesario, en ese mundo que se vislumbra ya, habrá que distribuir la riqueza de alguna forma diferente a la actual porque, si toda la riqueza la crea solamente el capital, dueño de las máquinas inteligentes, qué haremos la inmensa mayoría.

Desde luego que el trabajo va a perder aceleradamente importancia en el desarrollo de los seres humanos, de manera intuitiva empiezan a observarse síntomas en la forma de enfrentarse a la vida las nuevas generaciones, ellos han desplazado el trabajo del centro de la existencia. Hasta ahora el trabajo era la fuente de ingresos, la estabilidad, con ellas la base de la autoestima, de la posición social, de las posibilidades de desarrollo, familiares, etc. El trabajo era no solo importante, era esencial y el centro del que todo lo demás dependía. Para las nuevas generaciones el trabajo es importante, y frente a él son responsables, pero no es el centro de sus vidas, ven mejor el futuro que los que no somos igual de jóvenes, empiezan a adaptarse.

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