Los criterios de gestión y estrategia empresarial se alinean con los factores ESG (environmental, social, governance), ASG en castellano, ambientales, sociales, de gobernanza”

OPINIÓN. Charlas con Nadie

Por Manuel Camas
. Abogado

16/05/23.
Opinión. El conocido abogado Manuel Camas escribe su colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre la ‘guerra cultural’: “Desacreditar la lucha por la igualdad de género, el tratamiento de la inmigración (los párrafos anteriores sobre demografía describen lo necesaria que resulta), o la sostenibilidad, el cuidado del medio ambiente, el esfuerzo por contener el cambio...

...climático, son cuestiones a las que no hay más remedio que enfrentarse de una manera u otra, según la ideología”.

ESG

Cambio climático, igualdad de género, inteligencia artificial, digitalización, internet de las cosas, cambios demográficos, envejecimiento, inmigración.


Pese a que somos muy conscientes de la profundidad y velocidad del cambio, todas esas cuestiones están modificando la realidad en la que vivimos mucho más profundamente de lo que llegamos a percibir.

Jubilación de baby boom

Un ejemplo, resulta que los de la generación del baby boom nos estamos haciendo mayores, la explosión demográfica tras la guerra mundial, tras la tremenda y larguísima posguerra civil española, va camino de la masiva jubilación.

Entre 1957 y 1977 nacieron en España casi 14 millones de niños y niñas, aún se encuentran en edad laboral, pero en 2023 sus primeros miembros comenzarán la jubilación.

Hoy solamente hay 7 millones de españoles por debajo de 20 años, analicen ese dato unido al aumento de la esperanza de vida que, según el Instituto Nacional de Estadística era de 70 años en 1964 y de 83 en 2021; es fácil imaginar los cambios sociales que necesariamente deben generar estas circunstancias, no solamente en el ámbito de las pensiones, sino en hábitos de consumo, ocio, tipo de turismo, alimentación, transporte, necesidad de cuidados, hospitales, medicamentos, etc.

De los casi 48 millones de españolas y españoles, aproximadamente 9 millones tienen entre 55 y 69 años, por encima de esa edad más de 5 millones.


Esos números nos bastan para hacernos una idea de que la pirámide ha pasado a ser un rombo poblacional, y la diagonal menor de ese rombo, que señala el grupo de edad mayoritario, cada vez está más arriba.

Guerra cultural

Afortunadamente los teóricos de la guerra cultural van haciendo apabullantemente el ridículo, resulta fácil, sus disquisiciones se fundamentan en negar lo evidente.

Efectivamente hay cambios en nuestra cultura muy relevantes, basados en la tecnología e internet básicamente, como anteriormente lo fueron en lo que llamamos cultura pop. Pero la guerra ideológica, a la que quieren llamar cultural para esconder sus verdaderas intenciones, no tiene que ver con la cultura, desacreditar la lucha por la igualdad de género, el tratamiento de la inmigración (los párrafos anteriores sobre demografía describen lo necesaria que resulta), o la sostenibilidad, el cuidado del medio ambiente, el esfuerzo por contener el cambio climático, son cuestiones a las que no hay más remedio que enfrentarse de una manera u otra, según la ideología. Los adalides de la guerra cultural sin embargo, han decidido enfrentarse a todo eso negando la realidad, interesados en no corregirla, aunque ridículos, también son peligrosos, son capaces de asaltar el Capitolio. Aquí en Europa a menudo se disfracen de tecnócratas, no llevan cascos con cuernos, capas de pieles, caras pintadas.

La comodidad, la inercia de quedarme como estoy ante la incertidumbre del futuro, aplicada en tiempos de cambios incesantes, rapidísimos, sorprendentes, profundos, exigentes, resulta verdaderamente absurda, la táctica del avestruz convence a muchos, pero es evidente que pretenden ocultar intereses poco confesables.

El mundo empresarial

En el mundo empresarial, no exento de ideología, sin embargo, no hay ninguna duda de que los temas relacionados con la sostenibilidad, con los derechos fundamentales y la responsabilidad social, con el buen gobierno, la transparencia, el cumplimiento de las normas, son el camino correcto y necesario para que cualquier empresa tenga futuro.

Los criterios de gestión y estrategia empresarial se alinean con los factores ESG (environmental, social, governance), ASG en castellano, ambientales, sociales, de gobernanza. Hoy por hoy son trascendentes para cualquier empresa que pretenda ser competitiva y que quiera tener una estrategia de futuro, por encima de cualquier ideología, son conceptos radicalmente asumidos.

El factor ambiental en la toma de decisiones en función de cómo afectan las actividades de las empresas en el medio ambiente.

El factor social, el respeto a la diversidad, la igualdad, la inclusión, los derechos humanos o cuidados sanitarios, en nuestras empresas y en las de nuestros proveedores.

Y el factor de gobierno, la estructura de los consejos de administración, los derechos de los accionistas o la transparencia, entre otros.

El sector financiero se verá obligado a analizar el cumplimiento de este tipo de factores para que su cartera de créditos esté dirigida a fomentar una economía sostenible, dejará de parecernos extraño que sea más sencillo obtener créditos para edificar viviendas con eficiencia energética o desarrollar actividades que no aumente la huella de carbono. Y todo ocurre muy rápido.

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