“Resulta ahora que es ilegítimo que los políticos quieran alcanzar el poder mediante una votación en el Congreso, e igualmente que prometan hacer tal o cual cosa con los presupuestos generales del Estado, según el Sr. Feijóo eso es corrupción”
OPINIÓN. Charlas con Nadie
Por Manuel Camas. Abogado07/11/23. Opinión. El conocido abogado Manuel Camas escribe su colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre el ‘teatro’ de la derecho respecto a la amnistía: “En estos días de negociaciones y amnistía, la sobreactuación resulta aburrida, a veces cómica, otras peligrosa, señores y señoras con tanto porte tratando de convencernos de que todos los males del...
...infierno caerán sobre nosotros por una investidura de un gobierno democrático, con un resultado electoral pacífico que nadie pone en duda”.
Teatro
Charlando con Nadie no he podido evitar divagar sobre el enorme teatro que se hace estos días en política, en momentos como los actuales, si no fuese por lo serio que nos parece todo, pueden llegar a resultar cómicas las actuaciones de unos y otros.
El expresidente de la Generalitat, Sr. Puigdemont, aún prófugo de la justicia, finge retrasar un acuerdo al que está obligado porque resuelve los problemas judiciales de cientos de cuadros de su partido, intenta aparentar, ante un público independentista, pero compite con ERC que le gana por la mano y cierra el acuerdo haciendo suyas cuestiones que seguramente también desde Junts se pedían.
Un viejo amigo, irónico y provocador, hace muchos años me decía: pero cómo va a valer lo mismo el voto de un ingeniero que el de alguien sin estudios. El Partido Popular nos asegura que España se rompe, otra vez, pero resulta que los enemigos son parte de los propios españoles, al final los votos parece que no deben valer igual.
Efectivamente mucho teatro en el sentido de fingimiento y exageración, se traspasa el límite de lo razonable. En lenguaje futbolero serían simplemente unos teatreros, lo malo de los futbolistas teatreros es que acaban dividiendo a las aficiones: pero no ves la patada que le ha dado, para que el espectador de al lado conteste que le ha echado mucho cuento.
A los futbolistas con cuento se acaba no creyéndolos, no deja de ser algo similar a lo de que viene el lobo.
Pero en estos días de negociaciones y amnistía, la sobreactuación resulta aburrida, a veces cómica, otras peligrosa, señores y señoras con tanto porte tratando de convencernos de que todos los males del infierno caerán sobre nosotros por una investidura de un gobierno democrático, con un resultado electoral pacífico que nadie pone en duda, en una sociedad que se someterá a controles democráticos cada pocos meses, autonómicas, municipales, europeas, generales.
Para sobreactuación la de las Sras. y Sres. Magistrados pronunciándose sobre política, intentado influir en el poder legislativo de nuestro Estado, eso sí que es antidemocrático, solo se puede decir, qué se habrán creído, arropados en sus asociaciones y sus vocalías caducadas, es difícil encontrar la independencia que legitima el poder que les otorga el pueblo.
Nos empeñamos en imaginar que todo sucede en los años treinta del siglo pasado, con un Mundo violento aún con las heridas abiertas de la Primera Guerra Mundial, con dos totalitarismos ideológicos, fascismo y comunismo enfrentados a muerte en una España analfabeta y con hambre.
Cuando escucho a algunos desilusionados de la UE, porque no llega tan lejos como querríamos, no puedo evitar sentir el enorme cinturón de seguridad que nos pone ante tantos desvaríos.
En momentos en los que nos enfrentamos a cuestiones complejas, como puede ser el pacto de investidura, nos facilita enormemente las cosas escuchar lo que dicen personas con las que sabemos no coincidimos en prácticamente nada. Sin duda el expresidente Aznar ha ayudado a que muchos ciudadanos tomen postura a favor del pacto de investidura.
Miedo del miedo, preferiría escuchar razones en lugar de amenazas, resulta ahora que es ilegítimo que los políticos quieran alcanzar el poder mediante una votación en el Congreso, e igualmente que prometan hacer tal o cual cosa con los presupuestos generales del Estado, según el Sr. Feijóo eso es corrupción, imagino él nunca prometió nada cuando se presentaba a las elecciones gallegas, ni un hospitalillo en una provincia u otra, o riegos en Doñana, u ochocientos mil puestos de trabajo en 1982 como hicieron otros.
Dicen que cuando se derrumbó la URRS uno de los efectos más llamativos es que los ciudadanos rusos, no acostumbrados a la publicidad, creían a pie juntillas lo que decían los anuncios de televisión. Estamos vacunados de los vaticinios catastrofistas, no quiero vivir asustado, ni con miedo, creo en el sistema, en sus contrapoderes, en sus límites, sus competencias, sus divisiones de poder.
Puede ver aquí anteriores artículos de Manuel Camas