“¿Qué podemos hacer cuando por más veces que nos manifestemos, por muchas solicitudes que registremos, por muchas denuncias que presentemos, los responsables no hacen absolutamente nada?”

OPINIÓN. Bomberos en lucha. Por Encierro Bomberos de Málaga.
@EncierroBombMlg

17/05/19. Opinión. Los Bomberos del Ayuntamiento de Málaga, tras su manifestación del pasado sábado 11 de mayo, hacen una grave reflexión en su colaboración semanal para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com en la que denuncian hechos muy importantes: “El alcalde se reunió con la regional de un sindicato de clase –de ámbito superior- para que ésta forzara a la sección municipal a firmar un...

...acuerdo de funcionarios donde, entre otras cosas, se reducían los servicios mínimos establecidos actualmente”. “Estas personas han amparado a un partido político que, a menos de 15 días de las elecciones municipales, necesitaba sacar en prensa que se había llegado a un acuerdo con los sindicatos del Ayuntamiento para anunciar algún logro, convirtiendo a este sindicato en cómplice necesario para la consecución de una estratagema política. Si los sindicatos que deben defendernos y los responsables políticos que deben velar por sus trabajadores no lo hacen, el fracaso no es solo de los bomberos, sino de todo el sistema”, denuncian los bomberos de @EncierroBombMlg.

El éxito y fracaso de la manifestación de bomberos

LOS bomberos de Málaga volvimos a salir a la calle para hacer visible la situación del colectivo a toda la ciudadanía, y fueron muchos los que nos acompañaron en la marcha que realizamos desde el parque de bomberos Central hacia la Plaza de la Constitución, donde al finalizar dimos voz a los diferentes representantes y leímos un manifiesto.



https://youtu.be/0mY2_puL49k

JUNTO a cientos de malagueños nos acompañaron bomberos de otros lugares de España, así como diferentes colectivos, asociaciones y representantes de los grupos políticos que nos han estado apoyando durante todos estos años de lucha, con multitud de mociones presentadas y aprobadas en los plenos que, mensualmente, se celebran en el Ayuntamiento de Málaga.

PODRÍAMOS tildar la manifestación de un éxito, tanto por el apoyo recibido como por los titulares de prensa que así la calificaron, pero tras más de dos años en huelga por unos problemas que afectan gravemente a cosas tan básicas como es la seguridad de los trabajadores y sus derechos laborales, tras ver como se han presentado desde el 2011 al 2018 más de 60 mociones al pleno de las cuales más de un 90% han sido aprobadas y de estas la mitad por unanimidad (o sea, que incluso ha votado a favor el Alcalde Paco de la Torre con todo su equipo de gobierno –Partido Popular-) pero luego no se ha cumplido ni el 5% de estas, hablar en términos de éxito como si celebráramos haber conseguido algo productivo es engañarnos a nosotros mismos.


POR lo tanto, no podemos considerar más que un fracaso la situación de los bomberos. Fracaso que quizás no sea achacable a los bomberos pues no han sido estos los que han desviado los presupuestos finalistas pertenecientes al Real Cuerpo de Bomberos a otros usos, o los que han decidido que no se saquen las plazas vacantes, o el que no se creen nuevas plazas para abrir el parque cerrado de Campanillas, o que se abandone el mantenimiento y las revisiones obligatorias de las herramientas y vehículos del servicio.

PERO, ¿qué podemos hacer cuando por más veces que nos manifestemos, por muchas solicitudes que registremos, por muchas denuncias que presentemos, los responsables no hacen absolutamente nada?

HACE casi dos años y medio una gota colmó el vaso y nos llevó a una huelga indefinida. Entonces, el alcalde D. Francisco de la Torre tuvo que realizar un decreto de servicios mínimos, documento donde se establece el mínimo personal que tiene que haber en un parque de bomberos, insistimos, el mínimo para garantizar la seguridad de la ciudad.


HACE unos días, este mismo alcalde, sobrepasado por el hecho de que el juzgado les está pidiendo explicaciones de los reiterados incumplimientos por la falta acuciante de personal, ha vuelto a echar al vaso una gota más, creando un precedente sin parangón en este Ayuntamiento y creemos que en todo el país, ya que se reunió con la regional de un sindicato de clase –de ámbito superior- para que ésta forzara a la sección municipal a firmar un acuerdo de funcionarios donde, entre otras cosas, se reducían los servicios mínimos establecidos actualmente.

ESTO que podríamos censurar de temerario por poner en riesgo a los bomberos y ciudadanos al bajar aún más el número de bomberos que debe de haber por turnos de trabajo y parque, provoca un daño colateral que no han sabido valorar y que costará muchos años reparar. Y es que este sindicato de clase, con representación estatal, defiende a bomberos en muchísimos otros municipios y lugares de España, habiendo trascendido y produciéndose tal escándalo, que el acto de traición a sus afiliados y bomberos de Málaga está empezando a tener consecuencias, no solo entre los afiliados a esas siglas, sino también entre el resto de entidades sindicales que ven aquí una oportunidad de captar afiliados.

PERO no podemos echarle la culpa a dicho sindicato como tal, como tampoco la tiene las siglas que lo identifican, si hay que buscar culpables los hallaremos en las personas que, reuniéndose a espaldas de sus propios delegados, están de acuerdo en bajar el número de bomberos que debe de haber como mínimo un día cualquiera, las que han dejado tirado a los bomberos con los que días antes decían ir de la mano con el mensaje de “la negociación en los despachos se ha acabado”.

Y lo que es peor, estas personas han amparado a un partido político que, a menos de 15 días de las elecciones municipales, necesitaba sacar en prensa que se había llegado a un acuerdo con los sindicatos del Ayuntamiento para anunciar algún logro, convirtiendo a este sindicato en cómplice necesario para la consecución de una estratagema política. Si los sindicatos que deben defendernos y los responsables políticos que deben velar por sus trabajadores no lo hacen, el fracaso no es solo de los bomberos, sino de todo el sistema. Que alguien resetee el sistema, por favor.

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