“Estuvo en Málaga, así como en Ronda y en Vélez-Málaga en la actual provincia, dentro del viaje que realizó al entonces Reino de Granada como recaudador de impuestos atrasados”
OPINIÓN. Viejos periódicos. Por Julio Fernández-Sanguino
Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales
23/03/23. Opinión. Julio Fernández-Sanguino, doctor en Ciencias Económicas y Empresariales, escribe una nueva colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre la relación de Cervantes con Málaga: “Cervantes pasaría a caballo por la capital en múltiples ocasiones en su ir y venir entre la Axarquía y el Valle del Guadalhorce. No obstante, la muestra más evidente de una estancia continuada...
...en la ciudad de Málaga es la que se conoce por la carta dirigida al Rey fechada en Málaga el 17 de noviembre de 1594”.
La vinculación cervantina de Málaga
En un artículo anterior se detallaban los autores malagueños cuya obra había pasado a dominio público en 2023 por haber fallecido en 1942 (AQUÍ). Entre los escritores españoles cuyos textos han sido afectados por esta medida destaca especialmente Miguel Hernández.
Esto posibilitó que el 9 de marzo pasado la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes inaugurase las Bibliotecas de Autor del poeta oriolano junto con la de Antonio Machado para poner a disposición de todos las obras de esos autores, junto con otros textos relacionados con ellos, en un entrañable evento en el Salón de Actos del Aulario II de la Universidad de Alicante que pudo seguirse en directo vía streaming.
Por otro lado, la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes mantiene una encomiable labor en pro de la cultura e historia de este país y entre sus numerosos portales ofrece uno relativo a la “Red de ciudades cervantinas”, cuyo director es José Manuel Lucía Megías y Francisco Peña su coordinador (https://www.cervantesvirtual.com/obra/red-de-ciudades-cervantinas-780037/).
Entre las ciudades que figuran en ese portal, está la ciudad de Málaga. Se precisa que Miguel de Cervantes estuvo en esta localidad, así como en Ronda y en Vélez-Málaga en la actual provincia, dentro del viaje que realizó al entonces Reino de Granada como recaudador de impuestos atrasados (alcabalas y tercias) a finales de 1594 y principios de 1595. Cervantes pasaría a caballo por la capital en múltiples ocasiones en su ir y venir entre la Axarquía y el Valle del Guadalhorce. No obstante, la muestra más evidente de una estancia continuada en la ciudad de Málaga es la que se conoce por la carta dirigida al Rey fechada en Málaga el 17 de noviembre de 1594. Lo propició el haber expirado el tiempo de su Comisión de servicio y tener que solicitar una ampliación de plazos, indicando en su carta que esperaba la respuesta al mismo lugar desde donde escribía. La contestación fue casi inmediata, pero entre ida y vuelta del correo a caballo se fueron, al menos, unos 22 días.
Asimismo, se destaca que Málaga es citada en varias obras cervantinas. Profundizando en esta cuestión, se aprecia que en la primera parte de Don Quijote de la Mancha figuran las siguientes referencias: “los percheles de Málaga” (Cap. 3), “bodegonero de Málaga” (Cap. 8) y “desembarcó en Málaga” (Cap. 30). Igualmente, Cervantes señala en su inmortal obra a otras ciudades de la actual provincia, como Antequera (Cap. 3 y 5) y Vélez Málaga (Cap. 41).
En Riconete y Cortadillo Cervantes recrea al personaje “Lobillo el de Málaga” y en El licenciado Vidriera inicia el relato de su novela con dos caballeros que iban a estudiar a Salamanca y recogieron a un muchacho al que hicieron su criado, pero con el tiempo fue como un compañero más. Sus amos acabaron sus estudios y le llevaron “a su lugar, que era una de las mejores ciudades de Andalucía”. Tras unos días, el antiguo criado quiso volver a Salamanca y “salió de Málaga”.
Por último, cabe señalar que en el portal mencionado y refiriéndose a la ciudad de Málaga se hace alusión al Teatro Cervantes, con una amplia descripción histórica, y a la Biblioteca Miguel de Cervantes, que abrió sus puertas al público en 1977 en el edificio de la Tenencia de Alcaldía de La Trinidad y que fue reubicada treinta años después en un nuevo edificio en el barrio de Las Chapas (Bailén-Miraflores).
Puede leer aquí anteriores artículos de Julio Fernández-Sanguino