Habrás agradado a algunos jeques, empresarios o inversores importantes, pero nos estás quitando a los malagueños/as nuestra identidad patrimonial y arquitectónica

“No sólo arruinas el Centro de Málaga por tu dejadez en el control de ruido, en las llegadas de turismo de borracheras o por tu pasividad en el desarrollo incontrolado de las viviendas con fines turísticos, que está haciendo que cientos de familias trabajadoras, que antes tenían alquilado un piso en el Centro, hayan sido expulsadas de su hábitat natural…”


OPINIÓN. Observando. Por Rafa Fuentes
Doctor en Económicas y Empresariales

31/05/22. Opinión. El exconcejal y reconocido militante socialista, Rafa Fuentes, escribe en su columna de colaboración en EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com un artículo sobre algunos de los edificios que se están cargando Málaga: “Por agradar a un Jeque, de esos que no respetan los derechos humanos, te vas a cargar el frente litoral de Málaga, con una especie de cipotillo de treinta plantas...

...que va a congestionar la Malagueta, privatizando un precioso espacio público. Vas a dejar a los malagueños/as sin el espacio litoral que queda de mayor valor, para dárselo a un jeque árabe para que haga negocios”.

Paco, te estás cargando Málaga

Alcalde, estás arruinando el centro de Málaga.


No sólo lo arruinas por tu dejadez en el control de ruido, en las llegadas de turismo de borracheras o por tu pasividad en el desarrollo incontrolado de las viviendas con fines turísticos, que está haciendo que cientos de familias trabajadoras, que antes tenían alquilado un piso en el centro, hayan sido expulsadas de su hábitat natural.

Déjame que te lo cuente en cuatro ejemplos, de los veinte que podría ponerte.

Por agradar a algún amigo tuyo, supongo, dejaste que se construyera en el entorno de calle Granada-El Pimpi-La Alcazaba, un edificio moderno, blanco, sin balcones y feo de cojones, que ahora es un restaurante japonés, rompiendo todo el entorno de esa única zona. A ver si alguien lo entiende.

Por agradar a algún empresario y arquitecto famoso, has dejado que se construya un verdadero bodrio de edificio en la entrada al centro de Málaga por Atarazanas. Dejaste que se tirara La Mundial, un precioso edificio (único del XIX que nos quedaba en esta zona) para que se construyera una inmensa mole de once plantas, con ventanitas horribles, que desgraciadamente se ha cargado el entorno urbano de Atarazanas.

Por agradar a un Jeque, de esos que no respetan los derechos humanos, te vas a cargar el frente litoral de Málaga, con una especie de cipotillo de treinta plantas que va a congestionar la Malagueta, privatizando un precioso espacio público. Vas a dejar a los malagueños/as sin el espacio litoral que queda de mayor valor, para dárselo a un jeque árabe para que haga negocios.


Y por agradar a alguien (en este caso no sé a quién) te acabas de cargar la Alameda Principal. Si paseas por el lado norte de la preciosa Alameda malagueña, te encuentras varios palacios del s. XIX, todos ellos de cuatro plantas (números 36 y 34). Si sigues paseando te encuentras con la que fue una imponente residencia de la familia Heredia de principios del XIX. Posteriormente, te encontrarás otros edificios, todos ellos de cuatro plantas, que siguen la arquitectura de los palacios de hace dos siglos, de lo poco que queda del valioso patrimonio local. Y llegamos al nuevo edificio del número 22, donde hace poco quitaron los toldos que lo protegían (o mejor nos protegían a nosotros de tan asombroso despropósito) de tan tremenda barbaridad.

Paco, te has cargado la Alameda Principal.

Al lado de esos palacios de 200 años, todos ellos de unas cuatro plantas de altura, de una arquitectura andaluza... aparece de forma lamentable, un horrible edificio de 6 plantas, con unos balcones en la esquina muy modernos y en la fachada a la Alameda unas ventanas negras que las miras y te dan ganas de llorar.

Habrás agradado a algunos jeques, empresarios o inversores importantes, pero nos estás quitando a los malagueños/as nuestra identidad patrimonial y arquitectónica.

Querido Paco, ya tenías abandonados los barrios y ahora te da por arruinar el centro.

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