“El Andalucismo no excluye, limita o separa. No es supremacista. Su defensa es la defensa de la soberanía de Andalucía desde Andalucía y por Andalucía”
OPINIÓN. Boquerón en vinagre. Por Francisco Palacios Chaves
Programador informático
05/11/20. Opinión. El programador informático Francisco Palacios escribe en su colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com un artículo sobre la utilización política del Andalucismo: “Lo que no me da igual es que uséis mi lengua, mis señas de identidad mi ideología política (el Andalucismo) y mi nación como arma arrojadiza. No os lo consiento. A ninguno. Lo que me importa, y mucho, es...
...que se use el apoyo de la derecha y de la extrema derecha como herramientas partidistas y armas para dinamitar cualquier proyecto que tenga su cabeza y su corazón en Andalucía”.
¿Quousque tandem?
Sinceramente, me dan igual los motivos de la bronca entre IU, UP y Adelante Andalucía, los anticapis, los narnianos, los hobbits, los X-Men o los Clicks de Famobil. Me importan tres pimientos las razones, razones que se me escapan y se me hacen muy difíciles de tragar, de la expulsión del Grupo de Teresa Rodríguez mientras estaba de baja maternal y no podía defenderse. Me da igual quién empezara y por qué.
Lo que no me da igual es que uséis mi lengua, mis señas de identidad mi ideología política (el Andalucismo) y mi nación como arma arrojadiza. No os lo consiento. A ninguno. Lo que me importa, y mucho, es que se use el apoyo de la derecha y de la extrema derecha como herramientas partidistas y armas para dinamitar cualquier proyecto que tenga su cabeza y su corazón en Andalucía. Lo que me enerva es la gasolina que se le da a los que nos quieren en la misma posición servil de siempre.
Que no vengan a ponernos excusas como las del líder del PCE, de “inventarse un partido político de Andalucía, luego uno de Sevilla, luego uno de Écija y luego de un barrio de Écija, por decir algo”. Unas excusas que tienen de fondo música del NODO y aroma a ropa apolillada. No es una perspectiva política mediocre y reducida, es la realidad de un Estado plurinacional al que se le está dando la espalda, con unos resultados electorales que saltan a la vista y no engañan. Un simple vistazo a los obtenidos en Galiza y Euskadi lo corrobora.
El Andalucismo no excluye, limita o separa. No es supremacista. Su defensa es la defensa de la soberanía de Andalucía desde Andalucía y por Andalucía. El que quiera unirse al proyecto de un Andalucismo fuerte, tienen las puertas abiertas, pero que sepan que no queremos ser la marca blanca ni la marea de nadie, porque nuestros colores son el verde y el blanco, y de mareas sabemos más que cualquier mesetario.
Los que usen a Andalucía o cualquiera de sus referentes como objeto para atacarse entre sí me va a tener enfrente. Siempre. Y para mí van a representar lo mismo que la derecha, la ultra derecha o el extremo centrismo. Van a ser lo mismo.
Andalucía fue la tumba de UCD. Tiene toda la pinta de que lo será de los que venían a tomar los cielos y están escarbando en la dirección contraria.
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