“En La Malagueta se encandiló de El Litri, en Torremolinos, del agua del Mediterráneo y en la Feria, del vino que no paraba de beber hasta que amanecía”

OPINIÓN. Málaga y sus historias. Por Ramón Triviño
Periodista

24/06/20. Opinión. El periodista Ramón Triviño continúa su colaboración con EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com en la que recopila curiosidades de la historia de Málaga con un texto sobre la estancia de Ava Gardner en Torremolinos: “El rodaje de 'Pandora y el holandés errante' le había permitido conocer España en 1951, haciendo varias amistades que la habían integrado en la afición por los toros y por...

...la diversión nocturna”.

Ava Gardner, en la Feria de Málaga

La actriz Ava Gardner llega a Málaga en los primeros días de agosto de 1955 para pasar una temporada de descanso en Torremolinos.

Nacida en Carolina del Sur 33 años antes, la década anterior había saltado a la fama al destacar su belleza entre las 'Goldwyn girls' de la Metro y su éxito se había multiplicado a partir de 'Forajidos' (1946). El rodaje de 'Pandora y el holandés errante' le había permitido conocer España en 1951, haciendo varias amistades que la habían integrado en la afición por los toros y por la diversión nocturna.

“Interior, noche. Muy de noche; madrugada. Martiricos. Caseta de la Gran Peña. Agosto de 1955. El público baila las melodías de la Orquesta Ciudad Trujillo, que con maracas y aires dominicanos anima el local y le da un toque exótico a la Feria de Málaga.

Ava Gadner en el hotel Pez Espada. Foto: aqueltorremolinos.com.

Pero la atención cambia su centro de gravedad del escenario a la entrada. Se ha hecho un vacío alrededor de una gran corte. En el centro, la reina: Ha entrado Ava Gardner, guapa, majestuosa, simpática y cordial”, así evocaba el periodista Francisco Griñán, en el diario Sur del 1 de febrero de 2015 la presencia de la espectacular actriz en la Feria de Málaga.

El mismo diario Sur narraba en agosto de 1955 la estancia en Málaga de Ava Gadner diciendo “la Venus más inolvidable de la historia del cine se convirtió en la noria sobre la que giraban admiradores, fans y curiosos”.

Chapurreando español, sacando un cigarro ante el que se encendían tantos mecheros como en un concierto de Sinatra, su marido por aquella fecha y sonriendo ante “tanto y tanto piropo que tiene que escuchar” decía la crónica del periódico, que añadía “le puso el toque de sensualidad a aquella fiesta por faralaes. Porque había venido a eso, de jarana. Y a descansar... pero después de la diversión”.

Otras crónicas también se hicieron eco de aquella visita a Málaga de la diva de la gran pantalla, señalando que cuando Ava Gardner aterrizó en Málaga en agosto de 1955, la actriz sabía perfectamente a qué venía, a quemar la ciudad.

"Pasamos cuatro días gloriosos, yendo a las corridas, bañándonos en el mar y juergueando en las casetas de la feria", contó entonces el periodista Jorge Fiestas, tan inseparable de Gardner en esas fechas que incluso se alojaron en el mismo hotel, La Roca de Benalmádena.

En La Malagueta se encandiló de El Litri, en Torremolinos, del agua del Mediterráneo y en la Feria, del vino que no paraba de beber hasta que amanecía. "Era una bebedora de fondo y su capacidad de diversión era inagotable".

La protagonista de Mogambo, película que había estrenado dos años antes junto a Clark Gable, conocía bien el sabor de la noche española, como ya se ha reseñado antes, la había disfrutado en la Costa Brava.

Allí su recién estrenado esposo, Frank Sinatra, sufrió tal ataque de celos por el flirteo de la actriz con el diestro Mario Cabré y no tardó en coger un avión desde EEUU y plantarse en Cataluña para ver qué estaba pasando entre su esposa y el atractivo matador.

Y repitió juergas aún más alocadas en Madrid, ciudad donde aterrizó en 1954 y de la que no se marchó hasta 13 años después. Revolucionó las noches de la capital y las de los toreros, artistas y aristócratas de la época que no dudaban en seguir sin preguntar al "animal más bello del mundo". Lola Flores, Luis Miguel Dominguín o Paco Rabal estaban entre sus compañeros de desmadre capitalino en el piso que la actriz tenía en la calle Doctor Arce.

Ava Gadner en el hotel Pez Espada. Foto: aqueltorremolinos.com.

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