“En enero de 2018, la mítica marca malagueña de productos lácteos volvía a las tiendas de la mano de la distribuidora malagueña Quesol, que había adquirido los derechos sobre esta firma”

OPINIÓN. 
Málaga y sus historias. Por Ramón Triviño
Periodista

08/05/24. 
Opinión. El periodista Ramón Triviño, en su colaboración habitual con EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com, en la que recopila curiosidades de la historia de Málaga, escribe sobre la leche Colema: “A finales de los años 80 los resultados económicos de la Comercial Lechera de Málaga y los graves destrozos provocados en la factoría por las inundaciones de noviembre de 1989 aconsejaron su cierre,...

...lo que motivó la venta de la marca a Puleva por 400 millones de las antiguas pesetas”.

Colema, la leche de los malagueños

El día 21 de diciembre de 1963 la Comercial Lechera de Málaga (Colema) comienza la distribución en la provincia de Málaga de leche embotellada, la primera empresa en hacerlo en la Costa del Sol, que había nacido como una cooperativa de pequeños ganaderos. Una marca ligada a la memoria colectiva de los malagueños, muchos crecieron consumiendo esa leche fresca y de gran calidad que se guardaban en los frigoríficos de miles de hogares.


Para llevarla a todos los rincones de la provincia contaba con una completa red compuesta por 52 lecherías, 5 tiendas y 5 supermercados. Por entonces, aún existía la costumbre de adquirir el producto a lecheros ambulantes o en pequeñas tiendas que la despachaban a granel, de forma que los clientes acudían con un envase, las lecheras, a estos negocios familiares y volvían con la leche fresca a casa.

Instalaciones de Colema en la carretera de Cádiz

Cuando Colema comenzó a vender leche envasada se encargó de hacer campañas de publicidad y promoción anunciando que todo se hacía según las normas sanitarias de esos años y que había garantías de calidad.

A finales de los años 80 los resultados económicos de la Comercial Lechera de Málaga y los graves destrozos provocados en la factoría por las inundaciones de noviembre de 1989 aconsejaron su cierre, lo que motivó la venta de la marca a Puleva por 400 millones de las antiguas pesetas.

Aunque 30 años después, en enero de 2018, la mítica marca malagueña de productos lácteos volvía a las tiendas de la mano de la distribuidora malagueña Quesol, que había adquirido los derechos sobre esta firma, después de que Puleva no renovara el registro de la marca.

El entonces administrador de Quesol anunció que conservarían el logotipo de la vieja Colema, con su famosa flor, que figuró en su primer producto, el queso fresco, que iría seguido, por la leche de vaca y de cabra, la mantequilla y distintos tipos de quesos.

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