“Favorecen las relaciones sociales directas, comunicación, pertenencia y encuentro. Son puntos de encuentro entre vecinos y amistades, lugares para ver eventos deportivos y también espacios informales para trabajar”

OPINIÓN. 
Piscos y pegoletes
. Por Enrique Torres Bernier
Profesor del Departamento de Economía Aplicada de la UMA


04/05/23. 
Opinión. El Doctor en Ciencias Económicas y especialista en turismo y ordenación del territorio, Enrique Torres, escribe en su colaboración en EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre los bares: “Un tema que no suele nombrarse es la relación que se forma entre el hogar y el bar de confianza que hace en muchas ocasiones que se convierta en una extensión de este, incluso...

...de mediación de ciertos problemas, que hacen a sus propietarios psicólogos, asesores sentimentales y económicos y paño de lágrimas de muchos de los parroquianos”.

Los bares como goce, identidad y terapia

“Bares, restaurantes y cafetería constituyen así espacios de construcción de ciudadanía, favoreciendo la inclusión social, reforzando sentimientos de pertenencia y evitando el aislamiento de personas que viven solas o mayores”
Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales

Alguna vez, recuerdo que durante la pandemia, hemos defendido en esta página las tabernas, y no solo por sus características tradicionales, sino también por sus funciones sociales, destacando siempre la existencia de la “barra” como elemento importante de comunicación y servicio.

Ha caído en mis manos un estudio procedente una institución nada relacionada con el turismo ni con el ocio, la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales en que, en primer lugar destaca la dimensión social de estos establecimientos en España, Sólo el 0,3% de la población vive en algún municipio sin bares o establecimientos hosteleros de proximidad y no se ha identificado ningún municipio mayor de 500 habitantes sin bares o similar.

Por su distribución territorial son las Castillas (España vacía) las que menos establecimientos tienen. Lo que queda claro es que son lugares de gran importancia para las relaciones sociales.


Del estudio se desprende de forma resumida cuales son las funciones más importantes de estos establecimientos en la índole social:

  1. Favorecen las relaciones sociales directas, comunicación, pertenencia y encuentro. Son puntos de encuentro entre vecinos y amistades, lugares para ver eventos deportivos y también espacios informales para trabajar. Habría que añadir que favorecen el crecimiento de la sociedad civil ya que sirven de apoyo a la constitución de peñas y asociaciones que habitualmente tienen su sede social en estos establecimientos.
  2. Evitan el aislamiento y la soledad: En una realidad donde cada vez existen más personas  que se encuentran solas, los bares tradicionales y de barrio alcanzan una puntuación de 3,81 sobre 5 en la percepción como lugares para prevenir el aislamiento y la soledad. Se contemplan como espacios ideales para que las personas solitarias tengan oportunidades de relación y convivencia vecinal. A esto contribuye aquellos establecimientos más amplios con instalaciones como salón de televisión o social en general. Igualmente los contactos se favorecen en los bares que poseen barra.
  3. Aportan seguridad al entorno. Muchos bares forman parte de itinerarios seguros para personas mayores, niños y niñas. En cierto modo son lugares refugio, sobre todo si tenemos en cuenta que los clientes. Se conocen entre ellos y sus entornos sociales.
  4. Los establecimientos de hostelería se conciben como proveedores de servicios personales, especialmente en personas que no quieren usar los institucionalizados y necesitan sentirse más autónomos, por lo que acuden a los bares para comer o encargar para llevar. Incluso sirven para dejar correspondencia o encargos (Amazón). En poblaciones de ruralidad muy dispersa, se convierten en puntos de recogida y entrega de correspondencia.
  5. Promueven la cohesión social, la integración y la inclusión social. En estos establecimientos se diluye el componente de clase y favorece la inserción socio-laboral, con oportunidades para el empleo o la actividad empresarial.

Un tema que no suele nombrarse es la relación que se forma entre el hogar y el bar de confianza que hace en muchas ocasiones que se convierta en una extensión de este, incluso de mediación de ciertos problemas, que hacen a sus propietarios psicólogos, asesores sentimentales y económicos y paño de lágrimas de muchos de los parroquianos.

De todo lo anterior hemos de concluir, no solo la importancia de los bares en España, sino también la importancia de que los cuidemos.

En una encuesta realizada en toda España hace algunos años, más del 60% de las familias aseguran que dejarían las llaves de su casa al dueño o encargado del bar de confianza si hubiera ocasión y motivo para ello.

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