Mientras, a la Confederación General del Trabajo (CGT), segunda fuerza sindical de la Empresa Municipal de Transportes, le niega un local donde reunirse

06/09/07. Sociedad. El despacho vacío de un concejal ausente y un sindicato mayoritario que no tiene un sitio donde reunirse. Tal es la anómala situación que se vive en las dependencias municipales de Tráfico de la Empresa Municipal de Transporte (EMT) en donde casi cuatro meses después de las elecciones...

Mientras, a la Confederación General del Trabajo (CGT), segunda fuerza sindical de la Empresa Municipal de Transportes, le niega un local donde reunirse

06/09/07. Sociedad. El despacho vacío de un concejal ausente y un sindicato mayoritario que no tiene un sitio donde reunirse. Tal es la anómala situación que se vive en las dependencias municipales de Tráfico de la Empresa Municipal de Transporte (EMT) en donde casi cuatro meses después de las elecciones locales sigue sin ser visto por su despacho el concejal del área, Juan Ramón Casero, quien prefiere ocupar el otro despacho que se habilitó en el anterior área que manejaba: Urbanismo, concretamente en Proyectos y Obras del edificio Eurocom de calle Mauricio Moro, según informan a EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com fuentes municipales y de la propia EMT.

A Juan Ramón Casero, el nuevo concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Málaga tras las pasadas elecciones del 27 de mayo, le corresponde como cabeza de este área ocupar el despacho que a tal efecto se dispone en el edificio de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) en Camino San Rafael 97, o incluso puede optar a otro despacho en el Centro de Control de Tráfico situado en la Avenida de Andalucía.

SIN embargo, ninguna de estas dos opciones le ha resultado atractiva a Casero. El anterior edil de Urbanismo no parece haber aceptado de buen grado su nuevo puesto y mantiene su sede operativa en el departamento de Proyectos y Obras de la Gerencia Municipal de Urbanismo en el edificio Eurocom, de calle Mauricio Moro.

UNA situación que ha propiciado, de una parte una reestructuración física de los puestos de trabajo de varios funcionarios en el edificio Eurocom, y de otra, una sensación de extrañeza entre los encargados municipales de Transporte ante la ausencia física de Casero en el centro de operaciones de dicha área.

CONTRADICCIÓN que se hace más evidente cuando la segunda fuerza sindical de la EMT, la Confederación General del Trabajo (CGT) ya ha expresado por carta -aún sin respuesta- al alcalde Francisco de la Torre la discriminación de la que se siente objeto al otorgarle “un trato desigual al resto de representantes de los trabajadores, ya que niegan un local sindical para el desarrollo de la normal actividad sindical en la empresa”, según expresa el secretario de Acción Sindical de CGT Málaga, Miguel Montenegro.

LAS discrepancias entre el concejal de Movilidad y los trabajadores de la EMT comenzaron a raíz de las polémicas declaraciones que realizó Juan Ramón Casero en respuesta a las quejas de los conductores sobre la peligrosidad que conllevaba el material deslizante de los nuevos carriles-bus del Parque de Málaga. Tras sufrir varios conductores incidentes al volante, Casero declaró (en ese momento todavía concejal de Urbanismo) que, "lo que hay que arreglar es la habilidad del conductor y llegar a la parada a la velocidad adecuada". Unas aseveraciones que provocaron airadas quejas de los trabajadores al entender que se estaba poniendo en duda su profesionalidad.