Es titular de un inmueble en Torremolinos junto a Miguel Narváez, también amigo cercano de Elías Bendodo, presidente del PP malagueño. El piso tiene cinco anotaciones de embargo, con una deuda que suma 736.791 euros

07/09/15. Sociedad. La secretaria general del PP de Málaga y exdiputada nacional Margarita del Cid tiene más de un millón de euros en deudas que afectan directamente a su domicilio. Del Cid es, junto a su marido Miguel Narváez, titular con carácter ganancial de un inmueble ubicado en la Urbanización Montemar, en Torremolinos. La mayoría son anotaciones de embargo judiciales y dos de embargo...

...administrativo por impagos a la Seguridad Social. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com ha tenido acceso a una nota simple de la finca, que demuestra la delicada situación que atraviesa el matrimonio, fruto de los negocios arruinados del cónyuge. Narváez fue uno de los impulsores de la fracasada cadena de restauración Lamoraga, que en Málaga abrió uno de sus locales más emblemáticos junto al chef Dani García. Para ello hizo uso de un local erigido en dominio público marítimo-terrestre, el paseo marítimo de La Malagueta, en el que realizó obras ilegales. Creó una terraza en su azotea sin permiso de la Junta. Margarita del Cid abandonó el Congreso en octubre de 2014, cuando muchas sociedades de su esposo habían entrado en concurso de acreedores. Un mes después de anunciar que abandonaría su escaño, la número dos del PP se desligó de los negocios de su pareja.

EL piso de Del Cid y Narváez está afectado por varias anotaciones de embargo, tres judiciales y dos administrativas. Según la nota simple, fechada el día 11 del mes pasado, una de las anotaciones de embargo judicial grava al inmueble para garantizar la reposición de 95.193 euros a Construcciones Metálicas Pylsa, empresa que suministró el material de cocina a los negocios hosteleros de Narváez. Esa anotación incluye además 28.550 euros en intereses y costas. Las otras dos anotaciones de embargo proceden de los Juzgados de Primera Instancia 9 y 12, y las ambas responden a una deuda del empresario con el BBVA. La primera anotación garantiza la reposición de 171.338 euros (51.401 en costas e intereses) y la segunda 44.494 euros (13.348 de nuevo en costas e intereses).

POR otro lado, las anotaciones de embargo administrativo responden a deudas con la Tesorería General de la Seguridad Social, de 2.091 euros (276 euros en costas e intereses y 418 en un recargo de apremio) y la segunda la mayor, de 237.276,31 euros con intereses que ascienden a 45.233 y un recargo de 47.455 euros, también de apremio.

LA secretaria general de los populares malagueños señaló hace ya un año a los medios que ella carecía de ningún tipo de responsabilidad “sobre este tema” (ver AQUÍ). El empresario comenzó a deber miles de euros a particulares y a la Seguridad Social cuando su esposa todavía desempeñaba un cargo en el Congreso de los Diputados. Del Cid abandonó la Cámara baja apenas un mes antes de que, a preguntas de los periodistas, defendiese, con evidente molestia, que no tenía nada que ver con los negocios arruinados de su esposo. Alegó no tener ningún tipo de responsabilidad al respecto. Del Cid, cuando fue diputada, declaró ante el parlamento que tenía el 50% de varias propiedades, es decir, su piso, un trastero y dos plazas de aparcamiento comunitario. También señalaba que estaba casada en régimen de separación de bienes. Sin embargo, la vivienda está excepcionalmente gravada por las deudas de Narváez.

EL empresario impulsó la marca Lamoraga como una cadena de restauración y hostelería de comida andaluza. La empresa matriz de toda esta iniciativa era Andalusian Gourmet Concept (AGC), de la que Narváez siempre ha señalado tener el 30% del accionariado. AGC estuvo años sin pagar la Seguridad Social, y la matriz acabó entrando en concurso de acreedores con un pasivo de 4,1 millones de euros, e incluso una deuda de 600.000 euros de la Junta andaluza que logró tras recibir un préstamo participativo de la Consejería de Turismo que en su momento dirigía Luciano Alonso (ver El anterior consejero de Turismo, Alonso, dio 600.000 euros al marido de la secretaria general del PP malagueño para La Moraga. El empresario, Narváez, echó a Dani García, hizo obras ilegales, no pagó ni al arquitecto, quebró y no devolverá el dinero).

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