03/05/06 MÁLAGA.
Ni la concentración vecinal que reunió a 400 personas el pasado
febrero en Puerto Espino, ni las dos mil firmas presentadas en el Consorcio del
Genal han sido suficientes para que las autoridades locales y
provinciales se manifiesten en relación a los derrumbes y hundimientos que ha
sufrido el recién reformado tramo de carretera Atajate-Gaucín.
03/05/06 MÁLAGA.
Ni la concentración vecinal que reunió a más de cuatrocientas personas el pasado
febrero en Puerto Espino, ni las dos mil firmas presentadas en el Consorcio del
Genal han sido motivos suficientes para que las autoridades locales y
provinciales se manifiesten en relación a los derrumbes y hundimientos que ha
sufrido el recién reformado tramo de carretera Atajate-Gaucín, en el interior de
la provincia de Málaga, según ha informado el portavoz de la Plataforma Vecinal,
José Verdugo, a EL
OBSERVADOR.
Entretanto, y en medio del silencio político, los graves problemas de
comunicación debido a los cortes y desvíos continúan dejando a los municipios de
la zona sin servicios básicos de médicos o maestros.
LA Plataforma, que no ha recibido respuesta de las autoridades desde que se
manifestaran hace dos meses, señala que en el tramo de la discordia se han
hundido ya tres curvas, se ha venido abajo un muro de unos tres metros de altura
y se ha hecho un socavón de cientos de metros. Es por esto que la organización
exige “la asunción de responsabilidades ante los derrumbes, el despilfarro de
dinero público en el levantamiento y posterior
demolición de la gran escollera del cruce de Benarrabá y el pronunciamiento de
los alcaldes del Consorcio ante la falta de seguridad en las obras”, explica el
portavoz. Asimismo, acusa al delegado de Obras Públicas de la Diputación de
Málaga, Francisco Fernández España, de tener un “total desconocimiento” del
curso de las obras después de que declarara en febrero que la carretera estaría
reformada en mayo como había sido previsto. “Siguen manteniendo que se
terminarán en la fecha prevista pero eso es imposible”, comenta
Verdugo.
COMO consecuencia de la mala comunicación, los vecinos denuncian que los empresarios
del sector turístico están siendo perjudicados debido al importante descenso del
número de visitantes. “El turista va buscando otros destinos más cómodos donde
no tenga que soportar largas esperas en una carretera poco menos que
intransitable”, asegura Verdugo, que completa diciendo que una vez finalizadas
las obras, se debería llevar a cabo una campaña de promoción del Valle del Genal
para compensar a los sectores afectados y a la población local, que desde que
comenzaron los arreglos, hace dos años, sufre la falta de servicios básicos de
profesores y médicos que no consiguen llegar a los municipios. Actualmente las
obras se encuentran paradas a la espera de que otra empresa especializada
inyecte hormigón en los muros de contención.
LA Plataforma vecinal Valle del Genal está formada por ciudadanos que no
representan a ningún emblema o partido político, según Verdugo. “Somos
vecinos con ideologías y pensamientos propios y distintos pero que no atienden a
sigla alguna, como algunos alcaldes quieren hacer
ver”. De hecho, asegura que ha sido necesario crear dicha plataforma para evitar
que los actos reivindicativos sean acaparados "por los políticos de turno, que
no quieren saber nada del problema para arreglar la situación pero que no dudan
en utilizarlo para sus luchas particulares". EL
OBSERVADOR se puso en contacto con el Ayuntamiento de Algatocín para
saber su opinión al respecto pero los miembros de la corporación se negaron a
dar declaraciones a esta revista.
PARA obtener más información sobre la situación de la carretera Atajate-Gaucín puede consultar la noticia publicada el 08/02/06: