En la red aparece un manifiesto relacionado con un supuesto centro socio-cultural que sorprendentemente ubican en las mismas instalaciones

12/03/14. Sociedad. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com ha tenido acceso a través de las redes sociales a un manifiesto de un supuesto centro socio-cultural de Málaga. Lo sorprendente es que en la página en la que aparece el texto también figura un mapa que sitúa este centro en la antigua sala ‘Espaciu’, radicada en pleno campus universitario de Teatinos, y que el mes pasado pasó a ser propiedad de la Universidad de Málaga.

EN estas instalaciones se emplazará el Servicio de Cultura de la UMA. La fundación ECCUS, propietaria y responsable hasta febrero de la infraestructura, había realizado una gestión nefasta y llevaba sin programar desde octubre.

TRAS más de seis meses de abandono y desuso, la antigua sala ‘Espaciu’ volverá a abrir sus puertas. Esta vez lo hará como nueva sede del Servicio de Cultura de la Universidad de Málaga. La institución académica recupera así los terrenos que en su momento la Junta de Andalucía le solicitó con el fin de cedérselos a la fundación privada ECCUS, quien a la postre construiría la sala Espaciu y el Centro de Iniciativas Universitarias (CIU). Las instalaciones se encuentran en el bulevar Louis Pasteur, en pleno campus universitario de Teatinos, justo al lado de la Facultad de Psicología y Ciencias de la Educación. Los contenedores que hacen las veces de sala y de escenario son en sí ‘Espaciu’, mientras que las oficinas son el Centro de Iniciativas Universitarias. ECCUS es una fundación privada cuya responsabilidad recae en el matrimonio que conforman Riansares de la Pola y Jesús Ramos.

LA inauguración del Centro de Iniciativas Universitarias fue en el año 2006. La Junta había solicitado previamente a la Universidad de Málaga la cesión de los terrenos. Así, se firmó un acuerdo entre la UMA, el gobierno autonómico y ECCUS, a quien la Junta cedió los terrenos pedidos a la Universidad. La fundación edificó la infraestructura que hoy se levanta en ese suelo. Estas instalaciones, que pertenecían hasta finales del mes pasado a la misma ECCUS, fueron construidas con dinero público: con subvenciones de la Junta de Andalucía. Lo que pretendía la sala ‘Espaciu’, según la nota de prensa de ese año, era “hacer realidad los proyectos e ideas de los jóvenes universitarios de Andalucía” y “actuar como puente entre la Universidad y sus estudiantes y de éstos con la sociedad”.

SIN embargo la Universidad de Málaga recupera ahora este suelo y ha comprado por una cantidad a la baja la infraestructura levantada por ECCUS (con el dinero público dado por la Junta) después de meses de inactividad. Según Riansares de la Pola, responsable de esta fundación privada, solo se recibió “alguna” subvención durante un año: dice que la Junta no desembolsó las ayudas prometidas. La UMA, el año pasado, denunció el convenio firmado entre las tres partes por la falta de actividad. Puestos de acuerdo, la Universidad recuperó el suelo cedido en su día y adquirió lo edificado por una cantidad entorno a los 90.000 euros. Para llegar a este acuerdo exigió previamente a la fundación un documento que acreditase que las instalaciones estaban libres de cualquier tipo de carga. Esta revista ha podido conocer que en el momento en el que la UMA se interesó por recuperar el suelo, dado el estado de abandono e inactividad de la sala, se descubrió que las instalaciones estaban embargadas por diversas deudas, entre ellas a dos trabajadores, a la Seguridad Social y a Hacienda. Para llegar al acuerdo firmado a finales del mes de febrero por el que la UMA ha recibido este suelo y el inmueble fuera de toda carga, la fundación ha tenido que abonar antes todas sus deudas y firmar el documento en el que certifica entregar las instalaciones limpia de polvo y paja comprometiéndose a sufragar cualquier tipo de reclamación que tenga lugar. Esta revista no ha podido saber la procedencia del dinero con el que se han cubierto las deudas. Aunque hasta ahora, la Junta siempre abonó la práctica totalidad de los gastos llevados a cabo por ECCUS.

DURANTE el año 2012, ECCUS externalizó sus servicios a una asociación cultural llamada ‘Malaparte’. Sus responsables, según explicaron a esta revista, perdieron dinero durante los meses en los que Malaparte estuvo gestionando la programación de la ‘Espaciu’. Por entonces, la sala se caracterizaba por contar con una gran afluencia de actividades y público: los alumnos de la Universidad de Málaga eran invitados a organizar sus propias fiestas, charlas, conciertos y exposiciones en este espacio. ECCUS despidió a Malaparte, justificando su decisión en que las instalaciones estaban deteriorándose. Malaparte abandonó la Espaciu en el verano de 2013.

DESDE entonces el recinto está abandonado. El mobiliario del mismo ha desaparecido, y el matrimonio responsable de ECCUS lo procura vender a través de redes sociales.

EL pasado 21 de febrero fue cuando la Universidad de Málaga firmó finalmente la devolución por parte de la Junta de este suelo, junto al pago de la infraestructura que hasta entonces era propiedad de ECCUS.

CURIOSAMENTE esta revista ha accedido a una web de un supuesto colectivo social en la que se puede leer un comunicado advirtiendo de la aparición de “La Colmena”, “contenedores de pensamiento, experimentación y democracia”. En la misma página web, un mapa sitúa estos “contenedores” en la misma dirección que la sala Espaciu (y nueva oficina del Servicio de Cultura). En las redes sociales, “La Colmena” ya cuenta con presencia. Entre los seguidores de “La Colmena” se encuentra el conocido activista Nico Sguiglia, la Casa Invisible, el colectivo Democracia Real Ya (DRY) y algún que otro colectivo.

DURANTE la mañana de ayer la Universidad de Málaga procedió al cambio de rotulación de la sala Espaciu, como se aprecia en las imágenes de esta revista.